Las empresas fintech han llegado para revolucionar el sector bancario, apostando por nuevas formas de gestionar nuestro dinero de una forma más ágil, sencilla y transparente. Las fintech han irrumpido con fuerza en 2015, pero todavía están mostrando sólo parte de su potencial.
¿Cuáles serán las principales tendencias del sector el próximo año?
- Según indica Spotcap, plataforma de crédito online para empresas, más de 80 start ups fintech han comenzado a operar en nuestro país en este sector en 2015, generando un volumen de negocio próximo en torno a 40 millones de euros. Y otras estimaciones cifran el mercado de la financiación alternativa en España en 62 millones, a cierre del ejercicio 2014. Aunque es una cifra apreciable, apenas es la punta del iceberg de lo que puede llegar a suponer este sector en nuestro país. El mercado de las fintech movió 1.140 millones de euros en 2014, liderado por Reino Unido, Irlanda, los países nórdicos y Holanda. Así, España todavía tiene mucho recorrido por delante.
- En cualquier caso, se trata de un mercado que todavía está naciendo y en pleno crecimiento, por lo que está expuesto a una rápida evolución y numerosos cambios. ¿Qué nos espera en 2016? Spotcap ha detectado cinco grandes tendencias que probablemente modificarán el panorama fintech en el año que entra.
- Uno de los aspectos más destacados probablemente sea la regulación. El sector financiero está legislado de acuerdo a los viejos métodos y modelos de negocio, por lo que no hay una regulación propia para la actividad fintech, existiendo muchas lagunas. Es imprescindible el desarrollo de un marco regulatorio concreto, con unos limites claros, que dé legitimidad al sector.
- Finalmente, Spotcap cree que 2016 será el año en el que se producirá el desembarco del fintech internacional en España. Indudablemente, esta irrupción dinamizará el mercado, pero también pondrá en serio riesgo a las start ups nacionales, que tendrán que afrontar una dura competencia con unos recursos económicos y humanos limitados.
- Lo que está claro es que las fintech están desafiando los métodos y el modelo de negocio de la banca tradicional. Y cabe preguntarse qué puede llegar a pasar si gigantes como Apple, Google, Amazon o Facebook comienzan a dar pasos más decididos en este camino.
