Esta serie de artículos van dedicados a los
políticos que dicen que se han contagiado con el coronavirus por no disponer de
suficiente información al respecto, aunque a todos ellos, al igual que al resto de la ciudadanía afectada, les deseo una pronta recuperación.
Introducción
El 22 de mayo de 1918 se informó por
primera vez de la llegada a Madrid de la que después se revelaría como una de
las peores pandemias en la historia de la Humanidad. Se estima que entre 40 y
80 millones de personas fallecieron por la mal llamada «gripe española», así
bautizada por ser España el único país donde la prensa informaba de su
existencia.
Aunque algunos investigadores afirman
que empezó en Francia en 1916 o en China en 1917, muchos estudios sitúan los
primeros casos en la base militar de Fort Riley y/ o en Camp Funston (EEUU), el
4 de marzo de 1918, pero la censura militar acalló las noticias sobre el brote
para no desmoralizar a sus tropas en los últimos estertores de la Primera
Guerra Mundial. Tampoco los demás países implicados en la Gran Guerra
informaron de los estragos de la enfermedad, que apenas un mes después ya había
llegado a Europa.
La censura y la falta de recursos
evitaron investigar el foco letal del virus de la gripe de 1918, aunque ahora sabemos que fue causado por
un brote de gripe virus A, del subtipo H1N1. A diferencia de otros virus que
afectan básicamente a niños y ancianos, muchas de sus víctimas fueron jóvenes y
adultos saludables entre 20 y 40 años, una franja de edad que probablemente no
estuvo expuesta al virus durante su niñez y no contaba con inmunidad natural.
Fiebre elevada, dolor de oídos,
cansancio corporal, diarreas y vómitos ocasionales eran los síntomas propios de
esta enfermedad. La mayoría de las personas que fallecieron durante la pandemia
sucumbieron a una neumonía bacteriana secundaria, ya que no había antibióticos
disponibles.
Tras registrarse los primeros casos en Europa
la gripe pasó a España. Un país neutral en la I Guerra Mundial que no censuró
la publicación de los informes sobre la enfermedad y sus consecuencias a
diferencia de los otros países centrados en el conflicto bélico.
La mutación del virus en agosto provocó
una segunda oleada epidémica letal.
Los infectados, en su mayoría jóvenes y adultos, morían a los pocos días de
haber contraído la enfermedad, por neumonías o dolencias respiratorias agudas
(aunque algunos científicos comentan que era por no tener antibióticos,
ni vacunas).
La oleada con el virus mutado afectó
menos a Madrid que a otras ciudades españolas, quizá por haber quedado
inmunizada al haber estado expuesta al virus durante la primavera.
España, aún no siendo el epicentro de la pandemia, fue
uno de los más afectados, con 8 millones de personas infectadas y 300.000
personas fallecidas.
ESTUDIO COMPARATIVO ENTRE DISTINTOS
CORONAVIRUS Y LA GRIPE
Un estudio publicado por el New England
Journal of Medicine ha analizado los últimos datos procedentes de China sobre
el nuevo coronavirus de Wuhan, en el que ha detallado algunas de sus
principales características. Además, en uno de los apéndices del artículo ha
analizado las diferencias entre el Sars-CoV-2 (el nombre técnico del nuevo
coronavirus) tambien llamado Covid-19, el SARS, el MERS y la gripe estacional (H1N1).
Todos ellos son virus respiratorios que
pueden derivar en neumonía y causar la muerte, sin embargo cuentan con unas
características particulares. Por ejemplo destaca la tasa de mortalidad del Covid-19
en pacientes con enfermedades asociadas: un 73,3 % de los casos. Le sigue
el MERS, con un 60%; y el SARS, con un 46% de fallecimientos entre los
pacientes con comorbilidades. Sin embargo, por sus características, no hay
datos disponibles entre los pacientes de gripe.
Además, en cuanto a la mortalidad de
estos cuatro tipos de virus (aunque los datos sobre el Covid-19 deberán
actualizarse una vez que se incluyan los datos de los pacientes fuera de
China), el Covid-19 tiene una letalidad que oscila entre el 1,4 y el 2,1%; el SARS un 9,6%; y el MERS es el que mayor letalidad tiene, con un
desenlace fatal en el 40% de los casos. Por su parte, la gripe es el
virus con mayor dificultad a la hora de calcular su letalidad, que se estima
entre 1 y 23 fallecimientos por cada 100.000 casos.
En cuanto a los factores asociados con
casos graves o fallecimientos, el Covid-19 provoca complicaciones entre los
pacientes de mayor edad y con mayor gravedad de la enfermedad. El SARS es
peor en pacientes de mayor edad, principalmente varones y con comorbilidades.
El MERS cuenta con una mayor letalidad entre pacientes inmunocomprometidos, comorbilidades
y otras infecciones. Por último, la gripe puede ser peor también entre los
pacientes de mayor edad, pero también entre embarazadas, pacientes con otras
comorbilidades asociadas y con trastornos metabólicos, entre otras patologías.
Transmisibilidad
La tasa de transmisibilidad del
COVID-19 puede estar entre 2,2 y 2,68. Le sigue el SARS, con una tasa de
entre 2 y 3, el virus de la gripe, con 1,5 casos. El MERS, por su parte, es el
que menor transmisión tiene, con una tasa inferior a 1.
Localización
Otra de las diferencias obvias entre
estos virus es por su localización. Así, por su origen, (aunque quizá la
definición deba modificarse con el tiempo) el COVIT-19 apareció en la ciudad china de Wuhan, en la provincia
de Hubei; el SARS, por su parte, se localiza en la ciudad de Guandong,
también en China; el MERS está focalizado en la ciudad de Yeda, en Arabia
Saudí; mientras que la gripe estacional, provocada por el virus H1N1 se
encuentra en todo el mundo.
Edad de los pacientes
La media de edad de los pacientes con
Covid-19 es de 47 años,
mientras que la de SARS es 39,9 y la gripe de 23,4 años, lo que significa una
mayor incidencia en menores. La mediana de edad de los pacientes con MERS, sin
embargo, es de 50 años.
Periodo de incubación
En cuanto al periodo de incubación del
virus, de media el MERS es el que puede pasar más tiempo 'latente' hasta unos
5,2 días; y su periodo oscila entre los 2 y los 13. Le sigue el SARS, con una
media de 4,6 días y un rango entre 2 y 14. Por su parte el COVIT-19 tiene un
periodo medio de incubación de 4 días y un rango entre 2 y 7. En todo caso,
el periodo de cuarentena que se ha establecido para el Covid-19 se tomó
precisamente del SARS. Por último, la gripe estacional es, entre estos virus,
el que menor tiempo de incubación tiene, con un periodo de 2 días y un rango
que va entre 1 y 7.
Síntomas
Los síntomas, en todo caso, son
similares en todas estas patologías. La principal dificultad a la hora de
compararlos es la variabilidad con que se puede presentar la gripe. Fiebre,
tos, y falta de aliento, son algunos de los más comunes.
Así por ejemplo, la fiebre puede
presentarse entre el 83% y 98% de los casos de Covit-19 y en
prácticamente todos los casos de SARS (99%-100% por cien) y de MERS (98% de los casos). Sin embargo, en cuanto a la gripe, puede darse entre el
36% y 100% de los casos.
De igual modo la tos afecta entre el
76% y el 82% de los casos de Covid-19; entre el 62% y el 100 % de los
de SARS; el 83 % de MERS; y entre el 40% y el 100 % de los casos
de gripe.
Fuente: abc.es; gacetamedica.com; reaccionmedica.com