La entidad Tax Justice calcula que se pierde cada segundo en un paraíso fiscal el equivalente al salario anual de una enfermera
Los países están perdiendo un total de
más de 358.000 millones de euros en impuestos no recaudados cada año debido al
abuso de las rebajas a los impuestos empresariales y a la evasión de impuestos
privados. Según la organización Tax Justice, lo que dejan de ingresar los
países es el equivalente a casi 34 millones de salarios anuales de enfermeras,
o el salario anual de una enfermera cada segundo.
El estudio de Tax Justice, publicado
junto con Public Services International, revela cuánto dinero público deja de
ganar cada país debido al abuso fiscal de algunos países, e identifica a los
más responsables de las pérdidas del resto. El método es analizar los datos
facilitados por las corporaciones multinacionales a las autoridades fiscales y
publicados recientemente por la OCDE.
Después de casi dos décadas de
campañas, la OCDE ha puesto los datos a disposición del público por primera vez
en julio de 2020, si bien se ha hecho después de que los datos de las
corporaciones multinacionales fueran añadidos y anonimizados, explica Tax
Justice.
De los 358.000 millones de euros en
impuestos que se pierden cada año en los paraísos fiscales mundiales, el
informe señala que 205.000 millones de euros se pierden directamente por abuso
de impuestos de sociedades por parte de corporaciones multinacionales, y
153.000 millones, por evasión fiscal privada.
Según Tax Justice, "las
corporaciones multinacionales pagaron miles de millones menos en impuestos de
lo que deberían al trasladar 1,16 billones de beneficios de los países donde se
generaron a los paraísos fiscales, donde las tasas de impuestos corporativos
son extremadamente bajas o inexistentes. Los evasores de impuestos privados
pagaron menos al depositar más de 10 billones en activos financieros en el
extranjero".
Los países más pobres, los más
afectados
"Si bien los países de ingresos
más altos pierden más impuestos debido al abuso fiscal mundial, las pérdidas
fiscales tienen consecuencias mucho mayores en los países de ingresos más
bajos", afirma el estudio.
Los países de ingresos más altos
pierden en total más de 320.500 millones cada año, mientras que los países de
bajos ingresos pierden 37.500 millones, sostiene Tax Justice. Sin embargo, las
pérdidas fiscales de los países de ingresos más bajos "equivalen a casi el
52% de sus presupuestos de salud pública, mientras que las pérdidas fiscales de
los países de ingresos más altos equivalen al 8% de sus presupuestos
sanitarios".
Del mismo modo, los países de ingresos
más bajos "pierden el equivalente al 5,8% de los ingresos fiscales totales
que suelen recaudar al año debido al abuso fiscal mundial, mientras que los
países de ingresos más altos pierden el 2,5% de media".
El mismo patrón de desigualdad global
también es visible cuando se comparan regiones en el norte y el sur. América
del Norte y Europa pierden en impuestos más de 79.700 millones y más de 154.300
millones, respectivamente, según el estudio; mientras que América Latina y
África pierden más de 36.000 millones y de 22.700 millones, respectivamente.
Sin embargo, las pérdidas fiscales de
América del Norte y Europa "equivalen al 5,7% y el 12,6% de los
presupuestos de salud pública de las regiones, respectivamente, mientras que
las pérdidas fiscales de América Latina y África equivalen al 20,4% y 52,5% de
los presupuestos de la salud pública".
La responsabilidad de los países ricos
Al evaluar qué países son los más
responsables de los abusos fiscales mundiales, el informe de Tax Justice
muestra que los mayores facilitadores son los países ricos, "y no los
países que aparecen en la lista negra de paraísos fiscales de la UE ni las
pequeñas islas de palmeras del imaginario popular".
Así, los países de más ingresos
"son responsables del 98% de las pérdidas fiscales, más de 351.500
millones de euros en impuestos perdidos cada año, mientras que los países de
ingresos más bajos son responsables del 2%, lo que les cuesta a los países unos
7.000 millones de euros en impuestos perdidos cada año".
Las cinco jurisdicciones más
responsables de las pérdidas fiscales, según la investigación, son: el
territorio británico de Caimán (responsable del 16,5% de las pérdidas fiscales
globales, equivalente a más de 58.700 millones); el Reino Unido (10%; más de
35.800 millones); los Países Bajos (8,5% ; más de 30.200 millones); Luxemburgo
(6,5%; más de 22.600 millones) y Estados Unidos (5,53%; más de 19.300
millones).
Los países miembros del G20, que se
reunieron el pasado fin de semana en una cumbre son responsables, según el
informe, "del 26,7% de las pérdidas fiscales mundiales", calcula Tax
Justice, lo que les cuesta a los países más de 95.600 millones de euros en
impuestos perdidos cada año. Los propios países del G20 también pierden más de
243.300 millones de euros cada año".
La red del Reino Unido
La jurisdicción que causa a los países
la mayoría de las pérdidas fiscales globales es el territorio británico de
ultramar de las Islas Caimán, que es responsable de que otros países pierdan
más de 58.700 millones de euros en impuestos cada año.
Sin embargo, las Islas Caimán son solo
una jurisdicción que pertenece a la red de territorios de ultramar y
dependencias de la corona británica, donde el Reino Unido tiene plenos poderes
para imponer o vetar la legislación y donde el poder de nombrar a funcionarios
gubernamentales clave recae en Londres. "Conocida como la telaraña del
Reino Unido", afirma Tax Justice, "la extensa investigación ha
documentado las formas en que esta red de jurisdicciones opera como una red de
paraísos fiscales que facilitan el abuso fiscal corporativo y privado, en cuyo
centro se encuentra la City de Londres: la telaraña del Reino Unido es
responsable del 37,4% de todas las pérdidas fiscales sufridas por países de
todo el mundo, lo que cuesta a los países más de 134.200 millones de euros en
impuestos perdidos cada año".
El "eje de la evasión
fiscal", responsable del 50% de las pérdidas
El Corporate Tax Haven Index 2019
había calculado que el Reino Unido, junto con su red de territorios de
ultramar, Luxemburgo, Suiza y los Países Bajos eras responsables de la mitad
del riesgo mundial de abusos de impuestos corporativos, y acuñaba la etiqueta
"eje de evasión fiscal".
Tax Justice relataba en abril de 2020
que el eje de la evasión fiscal le cuesta a la UE más de 22.650 millones en
impuestos perdidos cada año únicamente de las corporaciones multinacionales
estadounidenses que operan en la UE.
Y el informe de ahora confirma que el
eje de la elusión fiscal es responsable de más del 47,6% de las pérdidas
fiscales por los abusos del impuesto de sociedades. Y cuando se añaden las
pérdidas fiscales por la evasión fiscal privada, "el eje de la evasión
fiscal es responsable del 55% de todas las pérdidas fiscales sufridas, lo que
cuesta al resto de países del planeta cerca de 199.000 millones de euros en
impuestos perdidos cada año".
El análisis de las jurisdicciones en
la lista negra de paraísos fiscales de la UE demostró que el grupo es
responsable de solo el 1,72% de las pérdidas fiscales globales, lo que cuesta a
los países más de 5.900 millones de euros en impuestos perdidos al año. En
cambio, los Estados miembros de la UE son responsables del 36% de las pérdidas
fiscales globales, lo que supone más de 129.200 millones de euros en impuestos
perdidos cada año.
Tax Justice critica que "la lista
negra de la UE ignore los principales paraísos fiscales mientras se centra en
jurisdicciones que son secretas pero que juegan un papel insignificante en la
economía global. Dos jurisdicciones incluidas en la lista negra de la UE, Palau
y Trinidad y Tobago, aunque no cooperaron con las regulaciones fiscales
internacionales, no crearon pérdidas fiscales observables para otros
países".
Por otro lado, el territorio británico
de las Islas Caimán, incluido brevemente en la lista negra entre febrero y
octubre de 2020,, es responsable de la mayor parte de las pérdidas fiscales
(16,5% de las pérdidas fiscales globales, lo que equivale a más de 58.720
millones de euros al año). Tax Justice sostiene que el hecho de que se
considere que Caimán cumple con las normas fiscales internacionales a pesar de
ser el mayor facilitador mundial del abuso fiscal global "es una prueba de
que las normas fiscales internacionales actuales no son adecuadas para su propósito".
Fuente: El Diario.es