El número R de reproducción del virus
de la Covid-19, que indica el número medio de personas a las que cada caso
positivo contagia, está bajando en todas las comunidades autónomas, según datos
del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) que han sido analizados por el
equipo de biología computacional Biocomsc de la Universitat Politècnica de
Catalunya (UPC).
En siete comunidades, el número R ya
es inferior a 1, lo que indica que el pico de la segunda ola ha pasado y que el
número de nuevos casos diarios ha empezado a reducirse. En las otras diez,
según los datos más recientes del ISCIII, que llegan hasta el 29 de octubre, la
R seguía siendo superior a 1: aunque la epidemia se estaba desacelerando en los
últimos días de octubre, los nuevos casos todavía aumentaban día a día.
Pese a estas tendencias positivas, la
presión sobre los hospitales va a más en todas las comunidades menos en
Canarias, incluso en aquellas donde los contagios se están reduciendo. La
presión creciente sobre el sistema sanitario se explica porque, en los casos de
la Covid-19 que se agravan, suelen transcurrir unas dos semanas entre el
momento del contagio y el ingreso hospitalario. Las hospitalizaciones que se
producen ahora, por lo tanto, corresponden en su mayoría a contagios que se
produjeron hace unos 15 días, cuando la epidemia aún se estaba acelerando en la
mayor parte de España.
El análisis de Biocomsc se basa en
datos facilitados por las comunidades autónomas al ISCIII. La validez de las
conclusiones que se pueden extraer depende de la fiabilidad de los datos que
ofrecen las comunidades.
Al menos siete autonomías han pasado
ya el pico de la segunda ola
Ninguna comunidad con la excepción de
Canarias ha bajado la incidencia de la Covid-19 por debajo de 100 casos por
100.000 habitantes en los últimos 14 días, el umbral teórico a partir del que
se puede controlar la transmisión del virus sin grandes restricciones de
movilidad ni de interacción social.
Los datos indican que el 22 de octubre
solo dos comunidades habían conseguido hacer bajar su número R por debajo de 1:
Navarra y Madrid. Una semana más tarde, otras cinco habían dejado atrás el pico
de la segunda ola: Canarias, Catalunya, Comunidad Valenciana, Murcia y La
Rioja.
Seis más habían situado su número de
reproducción del virus entre 1 y 1,1 el 29 de octubre, lo que sugiere que a
principios de noviembre pueden haber bajado de 1, aunque aún no hay datos para
confirmarlo: Andalucía, Aragón, Baleares, Cantabria y las dos Castillas.
En todas ellas, sin embargo, el número
de hospitalizaciones, el número de pacientes que ingresan en uci y el número de
muertes por Covid-19 van todavía en aumento. En el conjunto de España, un 5,4%
de los casos positivos de infección por coronavirus requiere hospitalización.
De los casi 250.000 casos diagnosticados en los últimos 14 días –según datos
del Ministerio de Sanidad, que son algo inferiores a la cifra real porque
algunos casos se notifican con retraso–, más de 13.000 requerirán
hospitalización.
El análisis de Biocomsc no aclara si
las medidas introducidas hasta ahora serán suficientes para reducir la epidemia
a niveles que los sistemas sanitarios puedan gestionar, ni durante cuánto
tiempo será necesario mantener las restricciones. Dependerá de hasta qué nivel
se consiga reducir el número R en cada comunidad, informa Clara Prats,
directora del grupo de investigación sobre Covid-19 en Biocomsc.
Solo Canarias con menos de 100 casos
por 100.000 habitantes en últimos 14 días
Si la R se estabiliza en torno a 1, el
número de contagios dejará de aumentar, pero no se reducirá, de manera que
continuará llegando el mismo número de pacientes a los hospitales, que por lo
tanto seguirán desbordados.
Si la R se estabiliza en 0,9, como ha
ocurrido en Navarra en los últimos días de octubre y en Catalunya en los
primeros de noviembre, el número de nuevos casos tardará un mes en bajar a la
mitad. El descenso será lento, y en Catalunya, donde los casos deben reducirse
a una cuarta parte de las cifras actuales, habría que mantener medidas
restrictivas durante por lo menos dos meses.
Si se consigue bajar la R a 0,8, tal
como espera el Departament de Salut en cuanto se vean los efectos del último
paquete de medidas introducido el 29 de octubre, los nuevos casos se reducirán
a la mitad cada quince días. La situación mejoraría entonces el doble de rápido
y, en el caso de Catalunya, se podrían empezar a levantar las restricciones en
un plazo de un mes.
“Con medidas más restrictivas, el
descenso es más rápido que con medidas laxas y se puede recuperar antes una
cierta normalidad”, observa Clara Prats, de Biocomsc. “Pero hay que encontrar
un compromiso entre la rapidez del descenso y su coste social y económico”. Si
el coste repercute de manera desproporcionada en algunos sectores, Prats
defiende que “hay que buscar formas de compensar las consecuencias”.
Fuente: La Vanguardia.com