24 de marzo de 2021

ESPAÑA. Los políticos y los juzgados raramente casan bien.

 En pocas ocasiones, menos de las que considero necesarias, los tribunales abren juicio contra políticos, porque la verdad, es difícil pillarles con las manos en la masa, pues existían y existen muchas lagunas legales y más si dichos políticos ejercen tareas de gobierno, pues incluso, presuntamente, pueden llegar a utilizar medios del Estado para destruir pruebas que supuestamente les incriminan.

En primer lugar quería aclarar, respecto a la uniformidad de criterios debida, del PSOE en todos los territorios, que en honor a la verdad, no considero que el partido popular sea el más indicado para dar lecciones, después de la OPA hostil lanzada por el secretario general del PP hacia Ciudadanos, que en toda España hay jornadas de puertas abiertas en las sedes del PP, aceptando cargos salientes de Ciudadanos para desmantelarlo, excepto donde forman coaliciones de gobierno PP y Ciudadanos, faltaría más, como el Ayuntamiento de Madrid o las Comunidades de Castilla y León, Andalucía y Murcia (cuento a los tránsfugas de Ciudadanos en dicho gobierno)

Un poco de coherencia señores del PP. ¿ A qué estamos? ¿A setas o a rolex?

Pues si la pregunta fuese para mí, en mi humilde opinión entiendo, que los señores políticos del PP son más de ir a rolex, lo digo por asociación de ideas con la larga lista de ese partido, de imputados y condenados en casos de corrupción.

Ahora, si la pregunta fuese, ¿qué me pareció la declaración ante el juez de los expresidentes del gobierno del PP y los secretarios generales de la misma organización política?

Sin lugar a dudas diría que ha llegado el momento de ocuparse de la salud mental de los políticos, porque contestar a todas las preguntas allí formuladas mayormente con un, “no me consta”, “no lo sé”, “no era el responsable”, “no son mis competencias”, “no es la contabilidad del partido”, “que hay muchas personas que se llaman como yo” o algún que otro "es falso de toda falsedad", pues la mayoría de ellas podrían considerarse eufemismos del “no me acuerdo”, y considero que esas lagunas mentales, quizás sean consecuencia  de un síntoma característico de enfermedades víricas como la fibromialgia o el coronavirus, llamado niebla mental, así que mejor hagan caso del amable diputado de su partido que con buen criterio, siempre recomienda a todos con algún problema mental, que “vayan al médico”, tanto la cúpula antigua del PP  como la nueva, por favor. Porque si es una enfermedad mental con el tratamiento adecuado tiene solución. Que dicho sea de paso, lo que me extraña es que solo afecte a los políticos del PP.

¿Pero y sino lo es? ¿Podría ser verdad el desconocimiento de los pagos en dinero negro y de la existencia de la caja B?

Miren, primero, respecto de la existencia de la caja B, quedó acreditada según sentencia de la Audiencia Nacional que condenaba al PP por lucrarse de la trama Gürtel, ya que el tribunal consideraba probada la existencia de la caja B del PP, y confirmada por el Tribunal Supremo.

Y en segundo lugar, quiero decirles, que he tratado con suficientes CEO y directores generales de empresas para saber, que si algo tienen claro todos ellos, es el estado de cuentas de su empresa y los flujos importantes de dinero (salidas y entradas), pues aunque no lleven el día a día de la compañía, por medio de balances contables e incluso estadísticas y gráficos, están bien informados, ya que son los responsables de la empresa ante la ley y ejercen como tal, realizando auditorías encargadas al efecto, tanto internas como externas, al existir obligaciones legales al respecto. Desde luego, si yo estuviera dirigiendo la gestión de una empresa o partido político, seguro me hubiese enterado de la desaparición de 50 millones de Euros, que son precisamente los mismos que la Audiencia Nacional ha ordenado repatriar de cuentas bloqueadas en bancos suizos, procedentes de la trama Gurtel, que tenían como cliente único al PP.

Entonces, suponiendo tuviesen pleno conocimiento de todo, lo que nos quedaría sería, que presuntamente están faltando a la verdad. Por tanto y en ese contexto ¿dónde quedan los valores y la superioridad moral de la derecha?

En mi opinión, si se diese este último supuesto, sería un atentado contra la democracia y una falta de respeto a la ciudadanía y lo que es peor a los jueces, porque además de resultar inaceptable, es delito, puesto que un testigo tiene obligación de decir verdad cuando declara ante el juez, sino  está imputado o investigado.

Fuente: Redacción