OPINIÓN. El PP pretende justificar que tras las generales, si dan los números, formará coalición de gobierno con Vox, y nos despojará de derechos y libertades constitucionales

 En estas elecciones tenemos la obligación de escoger entre, vivir en democracia plena, o  que nos gobierne una coalición de derechas, cobarde a exponerse en debates, además de soberbia, mentirosa y faltona, en mítines, entrevistas y foros de debate, con pretensiones preconstitucionales. Siendo el resultado electoral quien determine si los españoles consentimos la deriva hacia un pasado predemocrático

En ese sentido, esencialmente en estas elecciones debemos elegir, entre dos modelos de gobierno, 

1º) Que respeta valores democráticos y principios constitucionales de la ciudadanía. 
2º) Que propugna lo contrario.

El primer modelo, el que respeta valores democráticos y principios constitucionales, está representado por un partido de centroizquierda como es el PSOE y también por  un partido de izquierdas Sumar, con quién quizás podría formar gobierno, de conseguir mayoría suficiente.

El segundo modelo, simbolizado por una coalición de ultraderecha compuesta por PP y Vox, de pretensiones preconstitucionales, que como no podía ser de otra manera, además de negar el cambio climático (caso Doñana), defiende no respetar ni valores democráticos, ni principios fundamentales constitucionales, a juzgar por los hechos conocidos allá, donde de forma explícita o implícita, gobiernan en coalición, tanto en los más de 100 ayuntamientos, como en Comunidades Autónomas donde también gobiernan, de Castilla y León, Extremadura, Comunidad Valenciana, Baleares, Aragón,…., que ha  llevado la deshonra democrática a las Instituciones autonómicas respectivas, introduciendo además de la censura, la inobservancia continuada de normas y principios fundamentales constitucionales que rigen los derechos y libertades de sus ciudadanos.

Y respecto del mapa autonómico y municipal, surgido de las elecciones del 28M, debo decir que veo pocas luces y muchas sombras democráticas, pues el PP ha maniobrado para que aún siendo el PSOE la lista más votada, no gobernase en ningún caso que no tuviese mayoría absoluta, unas veces pactando con Vox, como ahora en Extremadura, antes ocurrió en Castilla y León, o años atrás sucedió en Andalucía. Y otras  como en Canarias, que siendo el PSOE la lista más votada, el PP maniobró para otorgarle la mayoría a Coalición Canaria. Y que además de hacer lo mismo en decenas de ayuntamientos, en el resto de casos, simplemente llamó a Vox, y pacto cerrado, cosa que con toda seguridad volverá a ocurrir después de las elecciones generales, en aquellas comunidades que todavía no tienen elegido presidente autonómico.

Por otra parte, el señor Feijóo, de nuevo demostró ser especialista en faltar a la verdad, al decir, que gobernaría la lista más votada en unas elecciones o al manifestar sobre las pensiones que el PP siempre actualizó pensiones conforme al IPC, todo lo cual nos da pistas, del tenebroso futuro que le esperan a las pensiones caso la ultraderecha  gobernase y de la poca o nula credibilidad que evidencia el líder del partido popular al hablar de las mismas, así como en el resto de sus manifestaciones.

En estas circunstancias, el líder del PP, para justificar sus pretendidos pactos poselectorales con Vox, tiene la desvergüenza de pedir la abstención al PSOE si el partido popular resultase la lista más votada en las generales. Y personalmente opino al respecto que, en el pecado está la penitencia. Y en su momento ya indiqué que si pierde estas elecciones, cosa por otra parte bastante probable, tiene los días contados en política, pasando de candidato a la Presidencia del Gobierno, a la jubilación política anticipada en tiempo récord, aunque primero disponga de un retiro dorado como líder de la oposición, si la Sra. Ayuso lo permite, evidentemente.

Fuente: Redacción