6 de agosto de 2022

VACUNAS ANTICOVID. Bruselas acuerda con Hipra la compra de 250 millones de dosis de la vacuna española

 La Comisión Europea ha informado este martes de la firma de un contrato de compra conjunta con la farmacéutica Hipra para asegurar el suministro 250 millones de dosis de la primera vacuna española contra el coronavirus responsable del covid-19.

Según explican las autoridades europeas, por el momento hay al menos 14 estados miembro, incluída España, que participarán de esta primera compra y que en los próximos meses recibirán viales de la inmunización ideada, testada y fabricada en Girona.

El acuerdo de compra con Bruselas es el primero que ha trascendido en relación a la vacuna de Hipra pero puede que no sea el último. Según explicó hace tan solo unos días la directora de I+D y registros de la farmacéutica, Elia Torroella, en una entrevista con EL PERIÓDICO, la compañía también está manteniendo conversaciones con países de Latinoamérica, Sudeste asiático y Oriente medio para exportar su vacuna contra el covid-19.

La vacuna de Hipra, que ya ha sido testada con éxito en miles de voluntarios, se suministrará como dosis de refuerzo en personas mayores de 16 años ya vacunadas contra el covid-19. En estos momentos, la fórmula está en la última fase de revisión de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), quien finalmente decidirá sobre su aprobación final. Según calcula la farmacéutica, el visto bueno definitivo podría llegar justo a tiempo para el arranque de la campaña de vacunación de este otoño.

Cartera de vacunas europeas

La comisaria de Salud de la Comisión Europea, Stella Kyriakides, ha declarado que las dosis de Hipra "añaden una opción más a la amplia cartera de vacunas europeas". El acuerdo de compra conjunta de vacunas con Hipra, de hecho, se complementa con los contratos firmados previamente con AstraZeneca, Sanofi-GSK, Janssen Pharmaceutica, BioNtech-Pfizer, Moderna, Novavax y Valneva, lo que asegura unos 4.200 millones de dosis para el mercado comunitario en el marco de la estrategia de vacunación contra el covid-19.

¿Qué efectos secundarios tiene la vacuna Hipra del covid?

La comisaria de Salud de la Comisión Europea, Stella Kyriakides, ha declarado que las dosis de Hipra "añaden una opción más a la amplia cartera de vacunas europeas". "Con las infecciones por covid-19 en aumento en Europa, debemos garantizar la máxima preparación a medida que nos acercamos a los meses de otoño e invierno", ha argumentado Kyriakides en un comunicado emitido este martes. En estos momentos, con 1.340 millones de dosis administradas y el 81,4% de la población europea vacunada con pauta completa, el objetivo de Bruselas es ampliar la cobertura vacunal con dosis de refuerzo.

Los estudios realizados hasta el momento muestran que la vacuna de Hipra es especialmente eficaz cuando se utiliza como dosis de refuerzo en pacientes previamente inmunizados con otras fórmulas. Según explicó hace unos días Carmen Cámara, de la Sociedad Española de Inmunología, esto se debe a que "al cambiar de tipo de vacunas estamos estimulando otro tipo de células inmunes y así también conseguimos generar una producción de anticuerpos neutralizantes más potente y duradera".

Además, según explican desde la farmacéutica, el coste de las dosis sería inferior al de las primeras vacunas contra el covid-19. "No podemos dar cifras exactas porque se trata de información confidencial. Aun así podemos decir que el precio de nuestra vacuna es mucho más económico que las vacunas de ARN [Pfizer y Moderna, cuyo precio estimado se sitúa entre los 15 y los 20 euros, según la información que ha trascendido hasta el momento]", explicó Torroella en declaraciones a este diario.

Fuente: El Periodico.com

HIPRA: Diferencias y ventajas respecto al resto

Los estudios realizados hasta el momento muestran que es especialmente eficaz cuando se utiliza como dosis de refuerzo

La farmacéutica Hipra, que desarrolla una vacuna española contra el covid, ve como "un paso adelante" la firma de un contrato de adquisición por parte de catorce miembros de la Unión Europea que pueden solicitar hasta 250 millones de dosis.

Los estudios realizados hasta el momento muestran que la vacuna de Hipra es especialmente eficaz cuando se utiliza como dosis de refuerzo en pacientes previamente inmunizados con otras fórmulas. Según explicó hace unos días Carmen Cámara, de la Sociedad Española de Inmunología, esto se debe a que "al cambiar de tipo de vacunas estamos estimulando otro tipo de células inmunes y así también conseguimos generar una producción de anticuerpos neutralizantes más potente y duradera".

Otra de las ventajas de la vacuna de Hipra es que se puede almacenar a temperatura de nevera (y no requiere cadena de ultrafrío, como en el caso de Pfizer y Moderna). Además, según explican desde la farmacéutica, el coste de las dosis sería inferior al de las primeras vacunas contra el covid-19. "No podemos dar cifras exactas porque se trata de información confidencial. Aun así podemos decir que el precio de nuestra vacuna es mucho más económico que las vacunas de ARN [Pfizer y Moderna, cuyo precio estimado se sitúa entre los 15 y los 20 euros, según la información que ha trascendido hasta el momento]", explicó Torroella en declaraciones a este diario.

A la espera de lo que definitivamente diga la EMA, que empezó a evaluarla el 29 marzo, Hipra asegura que los datos están demostrando en la mayor parte de los casos una superioridad de la eficacia frente a todas las variantes -incluso BA.2 y BA4/BA.5, las que circulan actualmente por Europa-, con la ventaja de que la suya puede adaptarse a cualquiera que surja en 4-5 meses.

Fuente: El Periodico.com

DATA CENTER. Blackstone, Pimco y Damac se lanzan a por los proyectos españoles del sector

 Compañías como Compass y Prime Data Centers también sondean el mercado

La oportunidad para construir infraestructuras de centros de datos está atrayendo a España al capital extranjero. 

Diferentes fondos y compañías especializadas buscan proyectos para sumarse al boom de iniciativas anunciadas por distintos protagonistas en los últimos meses. Los fondos Blackstone y Pimco, la inmobiliaria dubaití Damac y las firmas estadounidenses Compass y Prime Data Centers, entre otras, están analizando operaciones para entrar en el mercado español, según fuentes de este sector.

La alta demanda de las compañías tecnológicas para dar servicios en la nube a clientes corporativos está impulsando con fuerza la creación de centros de datos. En la actualidad, Madrid cuenta con una capacidad instalada de 100 MW en este tipo de infraestructuras y Barcelona otros 20 MW. En junio, la consultora Colliers hizo público que en la capital española existen 14 proyectos para sumar otros 505 MW y en la ciudad condal otros 110 MW.

Pero los proyectos pueden ser muchos más, debido a la aparición de nuevas empresas especializadas en este sector que están captando recursos de fondos, además de que las inmobiliarias están virando para entrar en este sector.

Blackstone –a través de QTS–, Pimco, Damac, Compass y Prime Data Center están evaluando oportunidades de compra de terrenos para levantar proyectos, centros ya operativos e, incluso, han comenzado a abrir expedientes con compañías energéticas, debido a que estas infraestructuras son intensivas en el uso de electricidad fundamentalmente por la necesidad de refrigeración de los servidores.

El fondo estadounidense Blackstone adquirió el pasado año por 10.000 millones de dólares la inmobiliaria QTS Realty Trust, especializada en este tipo de activos, y que ahora busca oportunidades en España.

En el caso de Damac, inmobiliaria de Dubái especializada en propiedades de lujo, anunció en marzo que invertirá alrededor de 1.000 millones en data centers en distintas geografías, entre ellas en Europa. De esta forma, la sociedad de Hussain Sajwani –al que Forbes calcula una fortuna de 2.700 millones– busca diversificar en sus negocios para aprovechar el fuerte crecimiento de los servicios digitales.

Entre los que buscan proyectos, Prime es uno de los veteranos, ya que la firma de San Francisco, de 15 años de historia, cuenta con activos por aproximadamente 6.000 millones. Compass Datacenters, por su parte, es una sociedad de Dallas que está creciendo fuertemente en este sector.

Numerosos proyectos

Entre las empresas españolas, Merlin Properties (la mayor inmobiliaria en capitalización del Ibex 35) ha entrado en este negocio, ya construye un activo en Vitoria y prevé iniciar estos días las obras en Madrid y Barcelona, además de otro centro próximamente en Lisboa. La compañía tiene prevista una inversión de 596 millones de euros para construir estas infraestructuras con capacidad conjunta de 70 MW en dos fases.

En Madrid, las mayores iniciativas, ambas de 100 MW, son impulsadas por el fondo Thor Equities en Fuenlabrada y por Stoneshield, a través de su filial Xdata Properties, en San Fernando de Henares. CincoDías publicó en julio que Stoneshield, fondo impulsado por Juan Pepa y Felipe Morenés (hijo de Ana Botín), han puesto a la venta ese proyecto (o se abren a socios inversores), en una operación encargada a Morgan Stanley y CBRE.

Asimismo, una inmobiliaria especializada, la estadounidense Interxion, levanta en la actualidad su proyecto Mad 4 en la zona de Julián Camarillo de la capital y ha lanzado una nueva inversión en Sant Adrià (Barcelona). También en Barcelona, la inmobiliaria Panattoni levanta el mayor (42 MW) en Cerdanyola.

También existen otros grandes proyectos fuera de Madrid y Barcelona, el de Meta en Talavera de la Reina (Toledo), el de Ingenostrum (120 MW) en Cáceres o el de Aire Networks en Málaga. En la Península Ibérica, el mayor de ellos es el de la empresa Star Campus, de 450 MW, en Sines (Portugal).

OPORTUNIDADES DEL ‘HUB’ DIGITAL DEL SUR DE EUROPA

Inversiones. España ofrece grandes oportunidades para todas estas compañías, pues se está posicionando como el hub digital del sur de Europa, con fuertes inversiones en Madrid y Barcelona, que quieren codearse con Fráncfort, Londres, Ámsterdam y París, más saturadas ya. Un informe reciente de Spain DC, la Asociación Española de Data Centers, revisó al alza las inversiones directas previstas en nuevos centros de datos en el país y las elevó de 5.000 a 6.837 millones hasta 2026.

Regiones 'cloud'. Los gigantes tecnológicos Amazon, Google, Microsoft y Oracle ya han anunciado la puesta en marcha de sus regiones cloud en España, tras detectar una buena oportunidad de negocio local y europeo. Y a ello se suma la llegada de tres cables submarinos al país para afianzarse como un punto de interconexión.

Cables submarinos. Facebook y Microsoft ya han unido EE UU y Europa con su cable Marea, amarrado en Sopelana (Bizkaia), el gigante de las redes sociales también ha elegido Barcelona como nodo del cable 2Africa, que interconectará 23 países de África, Oriente Medio y Europa, y Google avanza en su cable submarino Grace Hopper, que conecta Bilbao con EE UU y Reino Unido.

Fuente: Cinco días

OCIO. Warner fusionará HBO Max y Discovery+ en una única plataforma para 2023

 El grupo planea ofrecer una suscripción más barata, incluso gratuita, a cambio de anuncios, siguiendo los pasos de Netflix

Warner Bros Discovery, la empresa resultante de fusionar Warner Media y Discovery Inc, anunció anoche que fusionarán HBO Max y Discovery+ en una única plataforma de streaming que comenzará a operar en el verano de 2023 en EE UU, en otoño de ese año en Latinoamérica y en Europa, en 2024. 

Así lo aseguró el consejero delegado de la nueva compañía, David Zaslav, quien avanzó en una conferencia con analistas e inversores que el grupo adoptará un enfoque "sensato", dejando de hacer películas destinadas solo a la plataforma, tras reportar unas pérdidas de 3.400 millones de dólares en su primer trimestre completo como compañía fusionada.

Se desconoce, por ahora, el nombre con el que se comercializará la nueva plataforma, aunque los directivos de Warner han reconocido que la marca HBO "es una de las joyas de la corona de la compañía". Lo que sí se sabe es que nacerá ya con una base de usuarios superior a los 90 millones en todo el mundo al combinar los dos servicios ya existentes. HBO Max, lanzado hace dos años con el objetivo de convertirse en la principal competencia de Netflix y Disney+, suma en la actualidad 76,8 millones de usuarios en EE UU, Europa y Latinoamérica. Por su parte, Discovery+ cuenta con unos 24 millones de suscriptores, principalmente en Estados Unidos.

El objetivo, según admitieron, es alcanzar los 130 suscriptores en todo el mundo en 2025, aún lejos de los 221 millones que pagan por Netflix en todo el mundo..

El nuevo servicio unirá los catálogos de WarnerMedia y Discovery, que iniciaron un proceso de fusión esta primavera para convertirse en el segundo grupo mediático más importante de Norteamérica, solo por detrás de The Walt Disney Company. Así, el nuevo conglomerado es propietario de marcas tan populares como HBO, CNN, Warner Bros., Eurosport y DC Comics, que pasarán a integrar la programación de la nueva plataforma, informó Efe.

La unión de ambos servicios llega en un momento en el que el mercado del streaming está empezando a mostrar sus primeros signos de saturación. Netflix acumula dos trimestres seguidos con pérdidas de clientes; la plataforma CNN+ clausuró su servicio un mes después de su debut y otras apuestas como Apple TV+ no terminan de despegar a pesar de contar con inversiones millonarias.

Según publicaba hace dos días Financial Times, las mayores plataformas de streaming de EEUU han perdido casi 400.000 millones de dólares en valor de mercado este año, ante el miedo de los inversores que ven cómo sus negocios empiezan a verse golpeados por la inflación, la caída de la publicidad debido a la crisis económica que amenaza con una recesión y los cambios de tendencia en la audiencia después de la pandemia.

Los acciones de las compañías del sector han caído, de media, un 35% desde principios de año, en comparación con el descenso del 13% del índice S&P 500, lo que ha supuesto unas pérdidas totales de 380.000 millones de dólares en capitalización bursátil, añadía el citado periódico.

Ante el nuevo contexto, Zaslav avanzó que Warner trabaja ya con la idea de ofrecer una suscripción más barata, incluso gratuita, a cambio de anuncios, lo mismo que Netflix va a implementar el año que viene.

Los tropiezos que las plataformas se están encontrando han llevado a que los estudios de Hollywood cambien la estrategia que comenzaron durante la pandemia y vuelvan a apostar por los estrenos exclusivos en cines para que las películas resulten rentables. Esta misma semana, la factoría decidió cancelar el estreno de Batgirl, un filme ideado para lanzarse por HBO Max, tras invertir 90 millones de dólares en su rodaje. Zaslav anunció, no obstante, un ambicioso plan a largo plazo para los personajes de la marca DC y dijo que se centrarán en "la calidad". "No vamos a lanzar ninguna película a menos que creamos en ella", aseguró. La compañía cuenta ya con otros tres estrenos en cartera: Black Amda, Shazam y The Flash.

"Nuestra estrategia ha cambiado en el último año y refleja la importancia, pero no la dependencia, del streaming", aseguró Zaslav, que se burló del enfoque de "gastar, gastar, gastar y cobrar muy poco" adoptado en los últimos años a medida que los grupos de medios se obsesionaban con el crecimiento de la transmisión en streaming. En su opinión, y tras analizar cómo se consumen los contenidos o cuánta gente compra un servicio en las plataformas, no tiene sentido ni valor económico el estreno directo de películas caras en las plataformas.

El CEO de Warner Bros Discovery se aleja, pues, de la idea de dar prioridad al streaming para mantener el negocio de las salas de cine y la televisión de pago tradicional el mayor tiempo posible. Zaslav cree que ambos son "un generador de efectivo" y un gran negocio para ellos durante muchos años, y reiteró este jueves su postura de que su grupo no va a enfocar la guerra del streaming como una carrera para ganar el mayor número de suscriptores.

El directivo reconoció en su charla que 2022 será un año difícil para la compañía en un contexto de economía en desaceleración. Los ingresos trimestrales de Warner fueron de 9.800 millones de dólares. Sus pérdidas netas de 3.420 millones, incluyen más de 2.000 millones en amortización de intangibles, 1.000 millones en gastos de reestructuración y otros, y 983 millones en costes de integración.

La compañía espera que el ebitda ajustado oscile entre los 9.000 y los 9.500 millones de dólares para 2022, lo que supone un descenso respecto a sus estimaciones anteriores de 10.000 millones de dólares fijadas antes del cierre de la fusión, culpando a unas perspectivas más complicadas por la caída de la publicidad, los gastos en contenido en streaming y una situación presupuestaria peor de la revelada antes de la fusión. Las acciones del grupo cayeron casi un 12% en las operaciones fuera de hora en Nueva York.

Fuente: Cinco días

TECNOLOGIA. Intel e Italia ultiman acuerdo para fábrica de ensamblaje de chips por 5.000 millones

 España debe acelerar la ejecución del Perte Chips si no quiere quedarse al margen de las inversiones más importantes

Italia está a punto de cerrar un acuerdo con Intel por valor de 5.000 millones de dólares (unos 4.920 millones de euros) para construir una planta de ensamblaje de chips en este país, según avanza Reuters, que cita a fuentes conocedoras del asunto. 

El movimiento se produce en plena batalla de subsidios entre EE UU, China y Europa para atraer fábricas de chips que les permita tener una mayor independencia tecnológica ante los problemas de suministro de este pequeño componente, cada vez más relevante para todas las industrias y la economía del futuro.

La inversión de Intel en Italia formaría parte de un plan del gigante estadounidense de los chips para invertir unos 80.000 millones de dólares en fábricas en Europa. La citada agencia asegura que el anuncio oficial de esta nueva infraestructura se hará a finales de agosto, antes de las elecciones legislativas en Italia, previstas para el 25 de septiembre. Y se espera que el Estado italiano aporte el 40% de la inversión total.

Intel ya anunció el pasado marzo una megainversión de 17.000 millones de euros para abrir una fábrica de chips de última generación en Madgeburg (Alemania), que creará 7.000 puestos de trabajo en construcción y 3.000 permanentes, y que se prevé esté operativa para 2027. Entonces, la multinacional estadounidense también avanzó que estaba manteniendo negociaciones con el Gobierno italiano para construir una fabrica de back-end de última generación en Italia, con una inversión potencial de 4.500 millones. La planta, según dijo entonces la empresa, crearía unos 1.500 empleos en Intel más otros 3.500 adicionales entre proveedores y socios, y estaría operativa entre 2025 y 2027.

Los acuerdos de Intel se producen después de que la Comisión Europea anunciara en febrero de este año que iba a aprobar la Ley de Chips europea para invertir más de 43.000 millones de euros y lograr que para 2030 el 20% de los chips de mundo se produzcan en la UE (ahora es el 10%).  Esa suma de dinero incluye inversiones comunitarias ya aprobadas en los planes NextGenerationEU y Horizonte Europa por valor de 30.000 millones de euros. No obstante, aún se desconoce el encaje de cada uno de estos acuerdos en el estricto marco de ayudas de estado comunitario.

Según Reuters, Intel y el Gobierno italiano estarían barajando diferentes lugares para la construcción de la fábrica, entre ellos Lombardía, Apulia y Sicilia, y mantiene conversaciones con otros fabricantes de chips como la taiwanesa MEMC Electronic Materials Inc y TSMC, STMicroelectronics, y la israelí Tower Semiconductor, que Intel compró a principios de este año.

La inversión en Italia, si como se espera sale adelante, es mucho más abultada de la anunciada por Intel en España, donde la compañía ha anunciado hasta ahora que va a invertir 200 millones en un plazo de 10 años (a los que el Gobierno español sumará otros 200) para crear un laboratorio pionero de diseño de microchips. El Barcelona Supercomputing Center, o Centro Nacional de Supercomputación, acogerá el laboratorio de procesadores RISC-V, que supondrá la contratación inicial de entre 250 y 300 trabajadores.

El acuerdo entre Intel y el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha tenido lugar dentro del marco del Perte de los microchips, de donde saldrán los fondos públicos para el proyecto. España y Europa deberán luchar duro para atraer inversiones ligadas al negocio de los chips en un contexto de máxima tensión entre EE UU y China. Ambas potencian han convertido los semiconductores, el cerebro de los dispositivos electrónicos, en el campo de batalla en su lucha por la supremacía tecnológica. Europa y España pueden quedarse al margen de las inversiones más importantes sino se acelera, respectivamente, la aprobación de la Ley de Chips y la ejecución del Perte Chips.

Washington ha aprobado una partida de 52.000 millones de dólares para ayudar a atraer la producción de chips al país y China tiene una inversión preparada de más de 150.000 millones de dólares hasta 2030. Y es que como dijo recientemente el CEO de Intel, Pat Gelsinger, en una conferencia en Aspen, los chips son tan estratégicos ahora como lo han sido hasta ahora los combustibles fósiles. "[La ubicación del] petróleo ha definido la geopolítica en las últimas cinco décadas, pero las fabs [fábricas de chips] darán forma a la de las próximas cinco".

La noticia de Intel con Italia llega también pocas horas después de la visita de la presidenta de la Cámara de Representantes de EE UU, Nancy Pelosi, a Taiwán, que no ha hecho más que agravar el enfrentamiento entre EE UU y China, poniendo a Taiwán, un país clave en el negocio de los semiconductores, en el ojo del huracán. La política estadounidense mantuvo una reunión el pasado miércoles con directivos de TSMC, con quien habló de la nueva Ley de Chips estadounidense, que prohíbe a los fabricantes que subsidie EE UU invertir en plantas en China en 10 años, y le pidió colaboración en áreas tecnológicas clave

Fuente: Cinco días.

FARMACEUTICAS. El Reino Unido designa medicamento innovador al Zepzelca de PharmaMar

 El laboratorio PharmaMar ha recibido el estatus de medicamento innovador en Reino Unido para su antitumoral Zepzelca.

Esta designación llega antes de que las autoridades británicas decidan si autoriza el fármaco y, de momento, ese sello sirve para facilitar el acceso a unos potenciales pacientes.

La compañía presidida por José María Fernández anunció este viernes, en un documento remitido a la CNMV, que Zepzelca (lurbinectedina) ha recibido lo que se denomina como innovation passport (designación de medicamento innovador) por parte de la MHRA (Agencia de Medicamentos y Productos Sanitarios de Reino Unido).

La vía de acceso y licencia innovadora británica tiene como objetivo acelerar el tiempo de comercialización, facilitando el acceso de los pacientes a los medicamentos, se explica desde PharmaMar. Los criterios para esta designación incluyen los casos en los que la enfermedad pone en peligro la vida o es gravemente debilitante, o en los que existe una necesidad significativa de los pacientes o de la salud pública y en los que el medicamento tiene el potencial de ofrecer beneficios a los pacientes (mejora de la eficacia o la seguridad, mejora de la atención al paciente o de la calidad de vida en comparación con otras opciones terapéuticas), según la empresa.

“Lurbinectedina es un medicamento innovador que ha demostrado un beneficio clínico para los pacientes con cáncer de pulmón microcítico recurrente y que ha obtenido aprobaciones provisionales en varios países, como Estados Unidos, Canadá o Australia, y se está desarrollando en otras indicaciones clínicamente significativas”, señaló El doctor Ali Zeaiter, responsable de desarrollo clínico y asuntos regulatorios del laboratorio.

En mayo, PharmaMar anunció que había presentado una solicitud de autorización de comercialización a Reino Unido para el tratamiento con lurbinectedina en pacientes adultos con cáncer de pulmón microcítico metastásico.

En 2020, PharmaMar e Immedica Pharma AB firmaron un acuerdo para la distribución en exclusiva de lurbinectedina en Reino Unido y otros territorios.

Zeaiter explica que el cáncer de pulmón microcítico representa una necesidad médica no cubierta en todo el mundo. “Nuestros objetivos están alineados con los de las autoridades sanitarias públicas de Reino Unido para facilitar y mejorar el acceso de los pacientes a medicamentos como la lurbinectedina”, afirmó. “Creemos que esta designación es un paso importante para facilitar el acceso de los pacientes con cáncer de pulmón microcítico a una nueva opción de tratamiento”, agregó.

Fuente: Cinco días

ESPAÑA. Ciberataque deja al CSIC sin conexión a internet durante dos semanas por gentileza de los camaradas rusos

 El mayor organismo de investigación español recibió este asalto el pasado 16 de julio y fue detectado dos días después, aunque no ha conseguido extraer datos, según el Ministerio de Ciencia


El Consejo Superior de Investigación Científicas (CSIC) sufrió los días 16 y 17 de julio un ciberataque procedente de Rusia, según ha informado el Ministerio de Ciencia e Innovación. 

El ataque, que según el Ministerio no ha conseguido extraer datos, se detectó el 18 de julio, lo que obligó a iniciar el protocolo para controlar y resolver el ataque, por lo que se cortó desde entonces el acceso a internet de diversos centros adscritos para evitar que se extienda aún más por el organismo.

A falta del informe final de la investigación, explica Ciencia e Innovación, el origen del ciberataque —de tipo ransomware— procede de Rusia, pero aseguran “que no se ha detectado pérdida o secuestro de información sensible y confidencial”. Este ataque es similar al que han sufrido otros centros de investigación como el Instituto Max Planck o la NASA en EE UU, explican.

Actualmente, solo algo más de una cuarta parte de los centros del CSIC han recuperado su conexión a internet como consecuencia del protocolo de defensa para estos casos y esperan que en los próximos días se restablezca en el resto.

El ataque denominado como ransomware es una de las técnicas de extorsión preferidas por los cibercriminales en los últimos años. Consiste en lograr que la víctima se infecte con un programa que se descarga en el equipo y encripta el sistema, para pedir a continuación una recompensa a cambio de liberarlo del secuestro (ransomware es la contracción de ransom y software, rescate y programa informático en inglés, respectivamente). Los ataques por ransmoware se han multiplicado desde que asomó la pandemia, de acuerdo con numerosos informes de compañías de ciberseguridad y del propio Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe).

Europa sufre un aumento de ciberataques desde que comenzó la guerra de Ucrania el pasado mes de febrero. Ante el temor de asaltos rusos, España elevó al nivel tres, de una escala de cinco, su alerta de ciberseguridad en marzo y se puso especial atención a los ataques informáticos procedentes de estos países en conflicto, según reveló la ministra de Defensa, Margarita Robles, en el Congreso de los Diputados.

Además, se creó un comité de ciberseguridad, dirigido por el Centro Criptológico Nacional (el organismo específico en la materia que depende del servicio secreto CNI), bajo el paraguas del Comité de Crisis activado por el Gobierno al inicio de la crisis de Ucrania. Tres meses antes, cuando aún no había comenzado la guerra, pero la crisis en la zona iba en aumento por el movimiento de las tropas rusas, un informe de este centro alertaba sobre el riesgo de ciberataques “de alta persistencia y sofisticación tecnológica”.

Sin conexión en los laboratorios

El problema del CSIC lo venían denunciando desde hace días algunos trabajadores de organizaciones dependientes del CSIC a través de Twitter e incluso en una carta a la directora de EL PAÍS. En ella, Pablo Chacón Montes, del Instituto de Química Física Rocasolano (IQFR-CSIC), denunciaba que las autoridades españolas de ciberseguridad, CNN y COCS, decidieron desconectar la Red tras un ataque “menor y localizado” y, como consecuencia de ello, estaban inoperantes. Juan Antonio Añel Cabanelas, trabajador del EPhysLab asociado al CSIC, calificaba a través de sus redes sociales de “incompetencia en grado máximo” la situación y explicaba que lleva dos semanas haciendo uso de los datos móviles de su dispositivo para poder trabajar y que tampoco funcionan los teléfonos.

Otras instituciones públicas españolas han sido víctimas de varios ataques en los últimos tiempos, como la página web de Cercanías de Renfe o el Congreso de los Diputados. En marzo 2021, el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) sufrió un ataque que paralizó la tramitación de las nuevas prestaciones del Ministerio de Trabajo, desde el seguro público de desempleo hasta los ERTES, entre otros. Además, obligó a volver a los formularios antiguos que se rellenaban a mano para permitir continuar con el trabajo. Según las primeras evidencias del ataque, todo apuntaba a que se trataba del mismo tipo de ataque ha sufrido ahora el CSIC, ransomware. Casi un año después, la cuenta oficial de Instagram del Estado Mayor de la Defensa española fue atacada, aunque no tiene ninguna conexión con las redes internas del Ministerio de Defensa y de las Fuerzas Armadas, y se llenó el muro de selfis de una joven.

No solo las entidades de carácter público han sido perjudicadas, también del ámbito privado e incluso ONGs de ayuda humanitaria. Un 39% de las empresas han reportado vulneraciones digitales semanales en sus sistemas, según confirmó el Departamento Digital de Reino Unido en abril de este año. Una de esas empresas que han padecido esa intrusión es Iberdrola. A mediados de marzo, la empresa vasca sufrió un ataque que comprometió los datos personales de 1,3 millones de clientes, incluyendo nombre, apellidos, DNI, domicilio, número de teléfono y dirección de correo electrónico. Sin embargo, los ciberdelincuentes no lograron acceder a los datos financieros, como el número de cuenta corriente o de tarjeta de crédito.

Fuente: El Pais.com

IA. La inteligencia artificial de Google predice la estructura de todas las proteínas conocidas y abre un nuevo universo para la ciencia

 Un algoritmo resuelve uno de los mayores problemas de la biología actual al calcular la forma de 200 millones de moléculas, algunas de ellas esenciales para entender enfermedades devastadoras como el alzhéimer o el párkinson

Una inteligencia artificial propiedad de Google ha predicho la estructura de casi todas las proteínas conocidas; unos 200 millones de moléculas esenciales para comprender la biología de todos los seres vivos del planeta y los mecanismos de algunas de las enfermedades más prevalentes, desde la malaria hasta el alzhéimer y el cáncer.

“Este trabajo da inicio a una nueva era de biología digital”, ha celebrado Demis Hassabis, el experto en programación y neurociencia de 45 años que es el principal creador de AlphaFold, el sistema de redes neuronales que ha sido capaz de resolver casi por completo uno de los mayores problemas de la biología.

El británico Hassabis fue un talento juvenil del ajedrez y los videojuegos que en 2010 fundó Deepmind, una empresa volcada en crear una inteligencia artificial capaz de aprender como los humanos. En 2013, este sistema demostró ser mejor que cualquier persona jugando a videojuegos de la empresa Atari. Al año siguiente, Google compró la compañía por unos 500 millones de euros. En 2017, AlphaGo arrasó ante los mejores campeones de Go, el complejísimo juego de tablero asiático similar al ajedrez. Desde entonces, Hassabis volcó sus esfuerzos en un reto mucho mayor: predecir la forma tridimensional que tendrá una proteína leyendo únicamente su secuencia genética, escrita en dos dimensiones con letras de ADN.

Conocer la estructura tridimensional de estas moléculas a partir de su secuencia genética es esencial para entender su función, pero supone un problema de inmensa dificultad. Es como terminar un puzle con decenas de miles de piezas sin saber qué imagen representa.

Hasta la aparición de este sistema, dilucidar la forma de una sola proteína compuesta por 100 unidades básicas —llamadas aminoácidos— podía llevar 13.700 millones de años, la edad del universo. En el mejor de los casos, los científicos tardaban años usando microscopía electrónica o enormes aceleradores de partículas como el sincrotrón europeo de Grenoble (Francia). En cambio, el algoritmo de Google predice la estructura de cualquier proteína en unos pocos segundos.

“Este universo de proteínas” es “un regalo para la humanidad”, ha resaltado Hassabis durante la presentación de la nueva base de datos, durante una rueda de prensa celebrada el martes, junto a científicos del Laboratorio Europeo de Biología Molecular (EMBL), una institución pública que ha colaborado en el desarrollo de AlphaFold.

Antes de la llegada de esta tecnología, se había conseguido determinar la estructura de unas 200.000 proteínas, una labor que llevó 60 años y la participación de miles de científicos. Esa base de datos ha sido el material de aprendizaje de la inteligencia artificial de Google, que ha buscado patrones válidos que predigan qué forma tendrán las proteínas de las que solo se conoce su secuencia bidimensional. En 2021, el sistema ya resolvió la estructura de un millón de proteínas, incluidas todas las humanas. La nueva remesa de este año amplía el récord a 200 millones: prácticamente todas las proteínas conocidas de todos los seres vivos del planeta.

El acceso a esta nueva base de datos es libre y gratuito y el código informático de su inteligencia artificial es abierto y descargable. Este Google de la vida muestra la secuencia bidimensional de cualquier proteína y un modelo tridimensional que indica el nivel de fiabilidad de la predicción, que tiene un margen de error similar o incluso menor que los métodos convencionales.

Es importante tener en cuenta que AlphaFold no determina la realidad, sino que la predice. Lee la secuencia genética y estima cuál es la forma más probable en la que se configurarán los aminoácidos. La predicción tiene una alta fiabilidad, lo que permite ahorrar mucho tiempo y dinero a los científicos para hacer trabajos teóricos sin necesidad de usar costosos equipos para determinar la estructura real de una proteína hasta que sea absolutamente necesario.

Las aplicaciones de esta nueva herramienta son casi infinitas, pues las proteínas microscópicas están involucradas en cualquier proceso biológico imaginable, desde la muerte en masa de las abejas a la resistencia de las cosechas al calor, pasando por una infinidad de enfermedades.

El equipo de Matt Higgins, de la Universidad de Oxford (Reino Unido), ha usado AlphaFold como parte de su proyecto para desarrollar un anticuerpo —un tipo de proteína— capaz de neutralizar una de las proteínas esenciales para que el patógeno de la malaria pueda reproducirse. Dentro de años, este tipo de investigaciones podrían conseguir la primera vacuna altamente protectora contra esta enfermedad, pues impediría la transmisión del parásito de una persona a otra a través de la picadura de mosquitos.

Logros conseguidos

Otro de los hitos ya logrados es la estructura más detallada hasta la fecha de los poros nucleares, un complejo de proteínas con forma de rosquilla que es la puerta de entrada y de salida del núcleo de las células humanas y que está relacionado con un sinfín de enfermedades, incluidas el cáncer y las cardiovasculares. Esta nueva herramienta permite un acceso sin precedentes a entender “cómo la receta de la vida [escrita en el genoma] entra en funcionamiento al traducirse en proteínas”, explicó a este diario Jan Kosinski, investigador del EMBL coautor de este hallazgo.

Hassabis y el resto de responsables de Deepmind y el EMBL han asegurado que se han analizado los posibles riesgos que entraña publicar esta base de datos y hacerla accesible a todo el mundo. “Los beneficios son claramente superiores a las amenazas”, ha resaltado el creador del sistema, que ha añadido que en el futuro, a medida que se desarrolle esta tecnología, será la comunidad internacional la que deba decidir si debe limitarse su uso.

Una de las aplicaciones más tangibles es el diseño de moléculas a la carta que puedan bloquear proteínas nocivas o, mejor, modular su actividad, un efecto mucho más deseable en el diseño de nuevos fármacos, explica Carlos Fernández, científico del CSIC y líder del grupo de biología estructural de la Sociedad Española de Biología Molecular. Su equipo ha utilizado AlphaFold para dilucidar parte de la estructura de un complejo formado por varias proteínas esencial para la propagación del tripanosoma que causa la enfermedad del sueño que existe en países del África subsahariana.

Ahora quedan por delante años de trabajo para confirmar si las predicciones son correctas, explica el biólogo José Márquez, experto en estructura de proteínas del sincrotrón de Grenoble. “La próxima frontera será que AlphaFold pueda contribuir al diseño de fármacos bloqueadores de proteínas o activadores de ellas, un problema que ya están abordando”, explica. Otro escollo: el sistema no dice por qué una proteína obtiene su forma final, algo que puede ser esencial en la investigación de dolencias como el alzhéimer o el párkinson, relacionadas con un plegado incorrecto de las proteínas.

Alfonso Valencia, director de ciencias de la vida en el Centro Nacional de Supercomputación, habla de las carencias del sistema. “No todo está resuelto, porque AlphaFold solo puede predecir cosas que estén en el dominio de cosas conocidas. Por ejemplo, no puede predecir bien la estructura de un tipo de proteínas que protegen de congelación porque son raras y no hay muchos ejemplos en las bases de datos. Tampoco puede predecir la consecuencia de mutaciones, lo que es un punto muy negativo en medicina”, resalta.

También reconoce uno de sus puntos fuertes: que el código de todo el sistema es abierto, lo que supone que otros científicos pueden mejorarlo o modificarlo a su gusto, incluso si Google decide retirar el sistema de la red. “Es evidente que la gente de Deepmind está buscando ganar el Premio Nobel al actuar de esta forma tan transparente”, opina Valencia. “Por un lado, obtienen una gran imagen y una ventaja sobre sus competidores, como Facebook. Por otro, ya han sugerido que se reservan el uso privado de datos concretos sobre salud y para el diseño de fármacos”, añade.

Fuente: El Pais.com

COVID PERSISTENTE. Las secuelas continuadas del coronavirus que afectan a millones de personas: uno de cada ocho infectados tiene síntomas prolongados

 La investigación más afinada sobre la prevalencia de la covid persistente cifra en cerca del 13% las personas que la sufren. Los expertos reclaman más unidades de atención para tratar “un problema de salud urgente”


La pandemia de covid ha dejado tras de sí una alargada y misteriosa sombra que trae de cabeza a los científicos: la covid persistente. Una amalgama de síntomas duraderos en el tiempo —hay más de 200 diferentes identificados— que arrastran algunas personas tras pasar la infección por coronavirus. La comunidad científica no sabe con certeza por qué perduran ciertas secuelas, ni quién las va a sufrir, ni durante cuánto tiempo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha fijado una definición de la covid persistente —”condición poscovid”, la llama— para afinar el diagnóstico, y por los hospitales brotan consultas más o menos improvisadas para atender a los afectados. Pero pacientes y sanitarios siguen nadando en un mar de incertidumbre. Por no saber, no se sabe ni cuántas personas hay afectadas. El estudio más afinado hasta la fecha sobre la prevalencia, publicado el jueves en la revista The Lancet, sugiere que uno de cada ocho adultos infectados por coronavirus tiene síntomas persistentes, pero también tiene sus limitaciones. Los expertos reclaman más investigación y unidades de atención para “un problema de salud urgente”.

A Vicky Béjar, de 47 años, la covid la pilló al principio de la pandemia, en marzo de 2020. Empezó con síntomas digestivos, fiebre, cansancio, dolor de cabeza, fatiga... Pasaron los meses y todo ese cuadro clínico seguía, a días mejor y a días peor, pero nunca volvió a ser la misma. La covid persistente la acompaña desde entonces. “Sigo teniendo fiebre por encima de 38 grados, taquicardias, bradicardias, fatiga y deterioro cognitivo leve: soy contable, tengo una empresa familiar en la que llevaba los temas administrativos, y no puedo trabajar. Ahora estoy reaprendiendo la tabla de multiplicar. Me cuesta el tema numérico y organizativo, tengo una niebla mental que no me deja concentrarme”, relata.

Las cicatrices de la covid

Los expertos diferencian las secuelas propias de la enfermedad grave, como el fallo respiratorio tras haber pasado por cuidados intensivos con una neumonía grave —se ve el daño en las pruebas radiológicas—, de esos cuadros inespecíficos que, a menudo, persisten en personas que han superado la covid de forma leve. En estos últimos, no suele haber signos físicos ni órganos afectados, lo que complica el diagnóstico. En su caso, Béjar, vecina de Montcada i Reixac, en Barcelona, tiene “la suerte”, dice, de estar bajo la lupa de la unidad especializada del Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, que le hace seguimiento, pero denuncia el “maltrato institucional” del sistema: “No nos escuchan”.

Lorenzo Armenteros, portavoz de la Sociedad Española de Médicos Generales, lamenta el recelo de algunos colegas que “aún no se creen que exista” este cuadro: “Es una necesidad social y un problema epidemiológico importante. Hay que tratarlo”, zanja. La definición de la OMS ya matiza que se trata de síntomas que “duran al menos dos meses y no se pueden explicar con un diagnóstico alternativo”. La definición consensuada por el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) también va en la misma línea, aunque no marca tiempo de duración. “Lo que está claro es que algo ocurre”, apunta Antoni Serrano, psiquiatra del Parc Sanitari de Sant Joan de Déu e investigador del Centro de Investigaciones Biomédicas en Red de Salud Pública, que participó en el estudio del ISCIII.

Las dimensiones del fenómeno han bailado durante toda la pandemia en una amplia horquilla. El Observatorio Europeo de Sistemas y Políticas de Salud de la OMS apuntaba en 2021 que una cuarta parte de los infectados continuaba con síntomas hasta un mes después del diagnóstico y un 10% seguía afectado 12 semanas después. Un estudio reducía esta cifra al 2,3% y otra investigación elevaba la presencia de, al menos, un síntoma recurrente en el 73% de los infectados. Una encuesta de junio de los Centros para el Control de Enfermedades estadounidenses (CDC, por sus siglas en inglés) reportó que uno de cada cinco adultos que había sufrido la covid tenía síntomas persistentes.

No es tan fácil medir la prevalencia de una condición clínica con un cuadro tan variable y síntomas, en ocasiones, tan inespecíficos. El período de tiempo que se mida, la población en estudio o los síntomas usados para definir la condición de covid persistente influyen en esa variabilidad, apunta Aranka Ballering, autora del artículo de The Lancet e investigadora del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Groningen (Países Bajos): “Muchos estudios solo evaluaron si los síntomas de las personas estaban presentes en un momento determinado después de su diagnóstico de covid. Sin embargo, algunos síntomas relacionados con la poscovid son muy comunes (por ejemplo, dolor de cabeza, cansancio) y las personas los experimentan regularmente, incluso si no están enfermas. Además, algunos síntomas también pueden ser causados por cambios estacionales —por ejemplo, la secreción nasal o los estornudos pueden ser causados por la rinitis alérgica en lugar de la covid—. Esto implica que necesitamos poblaciones de control adecuadas si queremos estimar bien la prevalencia de la poscovid”.

En su investigación, siguieron a más de 76.000 personas entre marzo de 2020 y agosto de 2021 con cuestionarios rutinarios. De ellas, 4.231 participantes se infectaron de covid durante el estudio y los emparejaron con 8.462 personas de edad y sexo similares, a quienes nunca se les diagnosticó covid durante ese tiempo. “Incluimos un grupo de control de personas con covid negativo, lo que nos permitió tener en cuenta los efectos de las medidas de salud pública (como el confinamiento, la educación en el hogar…) sobre los síntomas somáticos, pero también nos permitió tener en cuenta los síntomas debido a los cambios estacionales. En segundo lugar, dado que nuestro estudio es un estudio de cohortes de población general, recopilamos información sobre la salud de las personas incluso antes de que se les diagnosticara covid. Esto nos permitió evaluar si las personas tenían un aumento en la gravedad de los síntomas después del diagnóstico de covid, en comparación con antes del diagnóstico”. Los participantes, explica la investigadora, funcionaban “como su propio control”. “Nos permitió ver si los síntomas de tres a cinco meses después de su diagnóstico de covid-19 eran peores en gravedad que antes o una continuación de los síntomas preexistentes”.

La investigación concluye que uno de cada ocho adultos que tuvieron la covid (12,7%) en la población general experimentan síntomas a largo plazo debido a la infección por coronavirus. Los síntomas principales referidos fueron, sobre todo, pérdida de olfato y/o gusto (anosmia y ageusia) y dolor muscular, aunque también fue frecuente el dolor en el pecho, la dificultad para respirar, el hormigueo y el cansancio.

Más preguntas que respuestas

Para Pere Domingo, coordinador covid del Hospital Sant Pau de Barcelona y que no ha participado en el estudio, la investigación es “muy sólida”: “Tiene un grupo control sin covid y eso es útil para ver la responsabilidad de la infección en esos síntomas”. Pero advierte: “Este estudio está hecho con cepas antiguas. No sabemos si es aplicable a la delta o la ómicron. Probablemente, haya diferencias porque con ómicron no se daba tanta anosmia”. La vacunación, que empezó con ese estudio ya en marcha, también podría haber influido para modular el impacto de la covid persistente, sopesa el médico del Sant Pau. Serrano coincide, de hecho, en que “la percepción es que la frecuencia de aparición de este cuadro era mucho más frecuente antes [en las primeras olas] que ahora”.

Gema Lledó, adjunta del servicio de enfermedades autoinmunes y sistémicas del Clínic responsable de la consulta poscovid, pone el foco también en las limitaciones de la investigación, que los propios autores mencionan: la prevalencia de covid puede estar subestimada porque hay casos asintomáticos que pueden pasar desapercibidos y, agrega Lledó, considerarse erróneamente como controles cuando se comparan ambos grupos. “El diagnóstico de covid no queda claro. Quedaba a criterio del médico y es una limitación razonable. Es verdad que esta situación está contemplada en la definición de la OMS, pero deberíamos hacer el esfuerzo por confirmar la infección si queremos saber la prevalencia real de la poscovid. Necesitaríamos estudios mejor diseñados. Si queremos saber la prevalencia, hagámoslo en la época en la que se está testando a todos los pacientes o usemos una técnica que nos permita confirmar si ha tenido covid”, expone la médica. Lledó considera fundamental confirmar la infección: “Lo más difícil es que te diagnostiquen bien porque convivimos con otras infecciones o enfermedades con síntomas parecidos, pero que tienen abordajes diferentes”.

Más allá del volumen de afectados, el fenómeno de la covid persistente sigue siendo una incógnita para los expertos. “Hay más preguntas que respuestas”, admite Domingo. Empezando por su origen. “Una hipótesis es que puede haber trozos de virus que persisten en el organismo y generan una respuesta patológica e inmunológica. Parece plausible”, sostiene el facultativo. Joan B. Soriano, epidemiólogo del Hospital La Princesa de Madrid y consultor de la OMS en el grupo de trabajo que definió la covid persistente, asegura que hay hasta siete mecanismos diferentes en estudio: “La inflamación persistente, la desregulación inmune, trastornos de la coagulación, persistencia viral, disfunción autonómica, mecanismos endocrinos o metabólicos y mala adaptación de la vía ACE2 [el receptor por el que el virus entra en las células]”. El experto apunta que, probablemente “muchos de estos mecanismos interactúan sinérgicamente en algunos pacientes” y lo que sí saben, añade, “es que la revacunación reduce la frecuencia y gravedad de la covid persistente”.

Domingo señala que los síntomas que más afectan son los trastornos neurocognitivos: “Esa especie de niebla cerebral, la dificultad para concentrarse, la disolución de la memoria retentiva…”. Y también los problemas respiratorios: “Nosotros vimos en un estudio con un grupo de pacientes que tienen un atrapamiento aéreo: las vías respiratorias más pequeñas siguen inflamadas y es como si los pacientes tuviesen asma”. Béjar asegura que lo más invalidante es el deterioro neurológico y la fatiga: “Hay días en los que el cuerpo no tira, no puedo salir de casa”.

Sin encontrar su origen, sin embargo, acertar con el tratamiento también se complica. Los especialistas apuestan por gimnasia: mental para sortear los problemas neurocognitivos, ejercicio físico para los daños motores y entrenar también el olfato, por ejemplo, para recuperar olores. Pero el impacto en la calidad de vida de los pacientes, coinciden los expertos consultados, es elevado. Tiene “muchas implicaciones sociales y personales”, explica Armenteros: “Algunos pacientes se recuperan, pero no al 100% y sienten angustia porque se les acaban las bajas laborales y no hay alternativas de adaptación al puesto de trabajo o incorporación paulatina”. Otros no han logrado aún recuperarse.

Tampoco hay certezas sobre los perfiles que predisponen a sufrir covid persistente. A pie de consulta y en los estudios revisados, como el de Ballering, se ve una mayor afectación en mujeres, pero la científica advierte: “Necesitamos investigación adicional para evaluar si el sexo femenino es un factor de riesgo”.

Los investigadores desconocen cuánto durará ese proceso. Es variable. El estudio holandés solo mira hasta los cinco meses tras la infección y Domingo apunta que la única forma de saberlo es “que pase el tiempo”: “Lo importante es el impacto en la calidad de vida de los sujetos, que parece que lo tiene, y si es un 13% de los millones de infectados, esto adquiere dimensiones estratosféricas”. Concuerda Soriano: si la afectación es del 13% de los contagiados —el epidemiólogo asegura que la investigación holandesa es “elegante y con una estadística sofisticada”—, se trata de “una frecuencia enorme” y, en España, avisa, dados los niveles de infección en la población, este problema de salud “puede saturar aún más los servicios de atención primaria”.

Impacto sanitario

El sistema sanitario, presionado ya por los ajustes de plantillas previos a la pandemia y la gestión de la crisis de la covid después, mira con preocupación el impacto de este fenómeno. Algunos hospitales se han avanzado a crear unidades multidisciplinares para responder a esta nueva demanda, pero los enfermos se quejan de la falta de circuitos y el peregrinaje que les toca hacer por distintas consultas en busca de respuestas. El colectivo Long Covid Act reclama “protocolos homogéneos para garantizar la equidad asistencial”.

Con los recursos que hay, asume Domingo, “se hace lo que se puede”: “Lo ideal serían unidades disciplinares para abordar los distintos problemas del paciente. Esto no se está haciendo en la medida deseable”. Armenteros asegura que los pacientes les transmiten “desesperación” después de vagar de médico en médico sin respuesta: “Ni la atención primaria ni los hospitales están preparados. El sistema ya está al límite y cualquier cosa lo satura. Y esto, sin un circuito adecuado, también. Vamos dando palos de ciego”. Urgen recursos en investigación y atención a los pacientes, advierte Domingo: “Lo que nos conviene es saber la historia natural de esta complicación: si es autolimitada, el impacto será llevadero; si persiste en el tiempo, requiere de otros niveles mayores de investigación y atención”.

Los expertos apuntan que, en la mayoría de los casos, los síntomas suelen ir remitiendo o, al menos, atenuándose. En el caso de la anosmia (pérdida del olfato) y la ageusia (disfunciones en el gusto), un estudio publicado en la revista JAMA Otolaryngology–Head & Neck Surgery arroja, tras estudiar a 168 personas con disfunción olfativa o del gusto tras la covid, que el 88% está completamente recuperado a los dos años. “En número importante se reducen síntomas con el tiempo, pero otros necesitan apoyo exterior. No se curan solos. Otros, se recuperan y vuelven a recaer”, lamenta Armenteros.

En lo que coinciden los expertos, con todo, es en su preocupación por la incertidumbre y el impacto que rodea a todo este fenómeno. Ballering avisa de que se trata de “un problema de salud urgente, con un número creciente de víctimas”. En un artículo publicado en la revista Jama, Rachel Levine, subsecretaria de Salud del Servicio Público de Salud del Gobierno de Estados Unidos, se hace eco del “enorme potencial del problema para los sistemas de atención médica y salud pública” que pueden suponer los síntomas persistentes: “Es importante dirigir la atención que tanto se necesita a la covid persistente. El cuidado de los pacientes afectados presenta desafíos dada la investigación incompleta, la falta de apoyo de diagnóstico y los problemas generalizados con el acceso a los servicios”.

RECOMENDACIÓN

¡Cuidado! Este artículo no es una broma, puesto que éste que les habla, también lo sufre, y sale a un calvario diario. Mejor vacunarse que contagiarse, por si acaso esto les toca a alguno de ustedes, porque ahora estoy vacunado, pero cuando me contagié por primera vez no lo estaba, ya que no existían las vacunas contra el coronavirus.

Fuente: El País