Las hiperbólicas manifestaciones de VOX, -algunas de ellas, considero fuera de la Constitución- en el debate electoral del lunes en TV, convierte en cómplices de las mismas a sus de facto, socios de gobierno en Andalucía y Madrid, por no confrontrar, recriminar o censurar, dichas manifestaciones.
Tras el debate electoral, y el ofrecimiento o el no ofrecimiento, de pactos pos-electorales por parte de los comparecientes según correspondiesen, todo sigue igual, con una ristra de descalificaciones, cuando no fake news(mentiras) o insultos hiperbólicos por parte de todos, al candidato del PSOE, Pedro Sánchez, hasta el punto que como colofón solo hubiese faltado que al también Presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, le hubieran llamado “fascista”.
Tras el debate electoral, y el ofrecimiento o el no ofrecimiento, de pactos pos-electorales por parte de los comparecientes según correspondiesen, todo sigue igual, con una ristra de descalificaciones, cuando no fake news(mentiras) o insultos hiperbólicos por parte de todos, al candidato del PSOE, Pedro Sánchez, hasta el punto que como colofón solo hubiese faltado que al también Presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, le hubieran llamado “fascista”.
Y solo en el
supuesto caso, que se les hubiese pasado por la imaginación, y también con ánimo de ayudar a la ciudadanía a clarificar conceptos, me voy a permitir
la licencia, en defensa de la objetividad, de escribir al respecto en el siguiente
apartado, basándome en el artículo(9), cortesía del doctor en
periodismo y asesor de la ONU, D. Francisco Rubiales, del cual incluyo “entrecomillado,
en cursiva y negrita” el ideario y argumentario con el cual
coincido, y que a mi juicio simbolizan lo más relevante del mismo, que unido a
mis reflexiones, modestamente opino, que bien describo los rasgos identitarios
del fascismo.
El fascismo es lo contario
de la Democracia.
Los fascismos -en todas
sus formas y manifestaciones- son totalitarismos (1).
“Partiendo del análisis
de la siguiente definición del fascismo,” al que recuerdan algunos
comportamientos de “la política actual de la Generalitat de Cataluña, y de
otros gobiernos autonómicos:”
“El proyecto político
del fascismo es instaurar un corporativismo estatal totalitario y una economía
dirigista, mientras su base intelectual plantea la sumisión de la razón a la
voluntad y la acción, aplicando un nacionalismo fuertemente identitario con componentes
victimistas o revanchistas, lo que conduce
a la violencia".
Con lo cual
concluimos que, “el fascismo es un comportamiento autoritario y déspota del
poder, que impone su voluntad sin contemplaciones y antepone el orden, la autoridad
vertical y el concepto de Estado a las libertades, los derechos y al mismo
individuo”.
“La mentira
institucional, es genuinamente fascista, como también es fascista la
corrupción, el intervencionismo exagerado, la marginación de los ciudadanos, el
despilfarro del dinero público, el engorde desmesurado del Estado, el desprecio
a valores, y el también vicio típico de la política española, que consiste en
anteponer los intereses propios y del partido al bien común”.
“El fascismo de algunos políticos españoles
va más allá de la corrupción, de cobrar sobres en dinero negro, de autorizar estafas
masivas con productos bancarios tóxicos o de cuando se preside una autonomía,
mirar para otro lado ante de la desaparición de cientos de millones de euros de
las cuentas públicas”.
Igualmente -en mi opinión y al
de no pocas publicaciones(3)- implican comportamientos fascistas,
calumniar, injuriar o difamar tanto a las primeras Autoridades del Estado como
a las Instituciones que representan, porque a mi entender, el fin último
de ningunear y denigrar las Instituciones democráticas del Estado, es subvertir
el orden Constitucional.
Por último y en mi
consideración, al igual que otros muchos opinan (3), son
fascismo los golpes de estado(2), de cualquier época y lugar, porque,
a mi juicio, van contra la esencia misma de la democracia, al usurpar de
forma violenta el gobierno de un país o estado, elegido por sufragio universal.
En resumen,
fascismo sobre todo es la marginación del ciudadano de la vida política, que persigue
su alienación social(5) y cultural(6), que deriva en el desamparo
de la ciudadanía frente a los abusos del poder.
CONCLUSION
Dejo al libre
albedrío de cada cual, la catalogación de las propuestas políticas sobre este particular,
al respecto de la toma de decisiones electorales, teniendo en cuenta, además de
los derechos y libertades, valores como el ecologismo para combatir los
efectos del cambio climático y por supuesto valores contrarios a la xenofobía, a la homofobía
o al antifeminismo. Y
sobre todo, preferentemente evitando las propuestas filofascistas(7),
e ignorando las sabidas manipulaciones.
Seguro que algunos piensan que muchos deberes son, pero la democracia es lo que tiene, hay que cuidarla mucho para que luzca bien.
Seguro que algunos piensan que muchos deberes son, pero la democracia es lo que tiene, hay que cuidarla mucho para que luzca bien.
NOTA IMPORTANTE
En relación a la polémica surgida por la imprecisión de las declaraciones del Presidente del Gobierno en
funciones y candidato a la Presidencia, Pedro Sánchez, respecto a la "dependencia jerárquica" de la Fiscalía, quisiera aportar lo siguiente:
- La Constitución española dictamina en el apartado 4 del artículo 124 que el Fiscal General del Estado será nombrado por el Rey, a propuesta del Gobierno, oído el Consejo General del Poder Judicial
- Además, el Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal -ley que regula la estructura y el funcionamiento del Ministerio Público- establece en el punto uno, del artículo 8, que el Gobierno podrá dirigirse a la Fiscalía para pedirle que promueva actuaciones en defensa del interés público o que rinda cuentas por una investigación en concreto.
(3) Amenazas
del fascismo a Instituciones democráticas(3.1) ; Amenazas del fascismo a Instituciones
democráticas(3.2).
(4) Fascismo
y golpe de estado (4.1);Fscismo
y golpe de estado(4.2);Fascismo y
golpe de estado (4.3)
(6) Alienación
cultural (6.1); Alienación
cultural (6.2)
(7) Filofascismo. No definido por la RAE. En el diccionario italiano lo califican como "simpatizante de las ideas fascistas".
Fuente: Redacción
(7) Filofascismo. No definido por la RAE. En el diccionario italiano lo califican como "simpatizante de las ideas fascistas".
Fuente: Redacción
POS DATA
La razón de la fuerza,
descalifica la fuerza de la razón.
Desde mi punto de
vista, el independentismo catalán abraza erróneamente la violencia, por entender
que el Gobierno del Estado rechaza injustamente sus reivindicaciones, basándome
en los siguientes aspectos:
- La mayoría actual
de diputados independistas del Parlament de Catalunya no se corresponde
con la mayoría social en Cataluña, por lo cual considero injusto, que tanto
Govern como Parlament de Catalunya, solo defiendan los intereses de la mitad
independentista de Cataluña, arrastrando a la mayoría social de catalanes
restantes -que en privado, con
razón admiten, no sentirse representados por la Generalitat de Catalunya-
a una deriva independentista, que para nada coincide con sus legítimos deseos
políticos y que las próximas elecciones generales a buen seguro confirmará.
- “El referéndum de
autodeterminación” no se encuentra recogido en el articulado de la Constitución
Española, que por cierto, fue votada y aprobada en “referéndum consultivo”
por todos los españoles, incluidos los catalanes.
- En España, como
cualquier democracia moderna, existe separación de poderes Legislativo,
Ejecutivo y Judicial. Y como tal, actualmente no procede la
aplicación de la Ley de la
amnistía(*), que en su artículo 1º, nos refiere a tiempos preconstitucionales
previos al 15 de diciembre de 1976 como fecha tope de comisión de delitos para
surtir efecto legal.
- Si desde el independentismo
catalán no se producen movimientos que sitúen sus posiciones dentro del
marco Constitucional y olvidan la violencia, veo difícil el inicio de negociaciones
que puedan llevar “al entendimiento”, y probablemente la situación política
en Cataluña corra riesgo de enquistarse, pudiendo pasar de desórdenes públicos
y violencia callejera, a situaciones mucho más graves, incluso extremas
(**) ó (***)
Los sueños de la
razón producen monstruos y víctimas inocentes.
Referencias del “Pos
Data”
(***) Operación
Judas
Fuente: Redacción