Samsung ha lanzado su nuevo teléfono,
que afianza la tendencia de hacer móviles sin casi marcos que son todo pantalla
El Samsung Galaxy S8 se lanzó oficialmente el viernes 28 de abril. Es un gran momento para la compañía, que
tiene que dar el do de pecho con un teléfono de alta gama que quite el mal
regusto que dejó el fabuloso, pero explosivo, Note 7. ¿Pero qué ofrece este
nuevo móvil?
Ya hemos hablado de él previamente y
en detalle, así que si queréis leer un texto más estructurado, aquí lo tenéis.
Si queréis unas cuantas pistas, para saber qué ofrece en un vistazo, seguid
aquí con la lista de los ocho aspectos clave del teléfono.
La pantalla
"infinita"
Es lo primero que se aprecia del
Galaxy S8: vaya pedazo de pantalla gigantesca tiene, ¡si parece que se derrite
hacia los lados y todo! Ocupa todo el frontal (hay un 83% de pantalla en él) y
tiene un formato diferente, de 18,5:9, en lugar del clásico 16:9. Esto tiene pegas,
como que los vídeos de YouTube y Netflix y demás dejan dos huecos negros, pero
es una tendencia que está aquí para quedarse.
El LG G6 fue el primer teléfono en
implantarla en Occidente y el Galaxy S8 va a cimentarla en el mundo de la
telofonía.
Y si los rumores son ciertos, el nuevo
iPhone también tendrá un frontal con una pantalla que lo ocupa casi todo. Otra
cosa es que el diseño sea tan redondo y bonito como en su principal rival para
este año, claro está. Samsung ha hecho un teléfono precioso, y es gracias a la
pantalla.
Dos tamaños, cuatro
colores
El tamaño de la pantalla dependerá del
tamaño del Galaxy S8 que escojas. Si te quedas con el modelo normal, la
pantalla tiene una diagonal de 5,8 pulgadas en el cuerpo de un teléfono más
bien pequeño, de lo que en el formato de 16:9 suele ser un teléfono de 5,2
pulgadas. Si eliges el Galaxy S8+, la pantalla crece hasta las 6,2 pulgadas,
aumentando su tamaño a algo similar a un iPhone 7 Plus, por ejemplo. Es un
logro, sin embargo, que ambos teléfonos resulten muy cómodos en la mano, porque
son finos y más pequeños que otros teléfonos con pantallas más pequeñas. Y
puestos a hablar de su diseño, hay varios colores a elegir: plateado, negro,
gris violáceo y azul metalizado. El tercero, nuestro favorito.
Una batería más
justita
Samsung ha tenido mucho cuidado para
que la batería del Galaxy S8 no dé problemas, y eso quizá es lo que les ha
empujado a hacerlas más justitas de capacidad. El Galaxy S8 tiene una batería
de 3.000mAh y el S8+, una de 3500 mAh. En ambos casos, se puede llegar al final
del día sin tirar de cargador, pero en el primero, llegarás justito, justito.
Si hay que criticar algo en este teléfono, la batería es uno de los aspectos
más flojos. Pero mejor que falte que no que sobre y el teléfono estalle, claro
está...Potencia de sobra, pero sin Snapdragon
Muchos hemos metido la pata al decir
que el Galaxy S8 llevaría el Snapdragon 835, el último gran procesador de
Qualcomm hasta la fecha, porque resulta que sólo lo integra en EEUU. En Europa,
tenemos que "conformarnos" con el Exynos 8895. En los test de
potencia que hemos hecho, este teléfono lo aguanta todo como si nada y cuesta
ponerlo al límite. Siempre es fluido, siempre abre las apps al instante (los
4GB de RAM ayudan a que muchas estén siempre en segundo plano) y los juegos van
a las mil maravillas. Y sí, es más potente que el Snapdragon 821 que lleva el
OnePlus 3T, por ejemplo.
Y puestos a mencionar características:
resiste al agua y al polvo, tiene 64GB de almacenamiento ampliables con microSD
y también bluetooth 5.0, que permite conectar dos auriculares y darles música a
ambos a la vez.
Un sensor de huellas
dactilares fallido
Otro aspecto que no va a gustar a
nadie: el sensor de huellas dactilares está en la espalda. Es una consecuencia
lógica de hacer que la pantalla ocupe toda la parte delantera, pero podría
haberse ejecutado mejor. A diferencia de otros muchos teléfonos que tienen el
sensor en la espalda, el Galaxy S8 lo tiene detrás y en un lado, a la derecha
de la cámara. Y encima es bastante pequeño, por lo que no sólo es cómodo, sino
que falla y no se encuentra casi nunca a la primera. Menos mal que hay otros
sistemas de seguridad (escáner de iris y rostro) para prescindir de él casi por
completo. Ojalá Samsung solucione esto con el Note 8 o con el siguiente Galaxy
S y los rumores de que integrarán el sensor bajo la pantalla sean ciertos.
Sólo una cámara, pero
vaya cámara
Samsung no ha arriesgado tampoco con
la cámara del Galaxy S8: es la misma que la del Galaxy S7, pero con unas
cuantas mejoras de software que lo hacen algo mejor. ¿Esto es bueno o es malo?
Casi me atrevería a decir que ni lo uno ni lo otro, porque es una de las
mejores lentes del mercado igualmente. No es tan buena como la del Pixel XL,
que tiene un software detrás mejor y trata las imágenes con mejores colores y
calidad en la mayoría de entornos, pero como ese teléfono no se vende en
España... Bien podríamos decir que esta es la mejor cámara de Android. Y casi
de todos los teléfonos, que el iPhone 7 Plus sólo sería mejor por esa segunda
lente con un aumento óptico.
Un asistente virtual
que no sirve para mucho
Ah, Bixby. Tenemos ganas de ver tus
habilidades para gestionar nuestra vida, como ya hacen Google Now o Siri. De
momento, la utilidad del asistente virtual de Samsung es muy reducida: sugerir
información en una pantalla propia (que se activa con el botón bajo los de
volumen) e identificar objetos en las fotografías, por si nos apetece
comprarlos en Amazon u otra parte. Sobre el papel, debería servir para mucho
más, pero como no está adaptado al español de España (tiene la versión
internacional de nuestro idioma, pero no es lo mismo), no se puede utilizar.
Una oportunidad perdida para tener una primera buena impresión de esta
tecnología.
Un modo de juego
especial
Y por último, un detalle que nos ha
encantado. Si eres jugón y te dedicas a matar las horas muertas en el metro, el
baño o el trabajo (mal hecho esto último) con el móvil y unas partidas a Clash
of Clans, Pinout o el juego de turno que sea, activa el Modo Juego del Galaxy
S8. No sólo dedicará toda la potencia y resolución del teléfono al juego sólo
cuando estés dentro de él, sino que bloqueará notificaciones y otros avisos que
suelen fastidiar mucho cuando estás inmerso en ese nivel tan infernal de Super
Mario Run. Un añadido que pasará por alto a muchos, como el poder mover los
iconos de 'volver' y 'multitarea' en la barra de menú inferior del teléfono.
Fuente: El Mundo.es