Un gasoducto España-Alemania entra en los planes de la OTAN
a) convertir la península Ibérica en una plataforma de distribución de gas, capaz de corregir la fuerte dependencia de Alemania y del centro de Europa del gas ruso; b) recuperar el fallido proyecto Midcat, el corredor mediterráneo del gas, en un nuevo contexto histórico; c) replantear el viejo proyecto del general De Gaulle en los años cincuenta de llevar el gas de Argelia hasta las fábricas de la cuenca de Rin.
El relanzamiento de una nueva conexión
transfronteriza con Francia para llevar gas al corazón de Europa se halla en
estos momentos en las mesas de trabajo de la OTAN, según han confirmado fuentes gubernamentales españolas. Alemania tiene mucho interés en
el proyecto, según las mismas fuentes, una vez aprobado, esta semana, el nuevo
catálogo de energías verdes para la transición energética en Europa, taxonomía
de la Comisión Europea que incluye el gas y la energía nuclear.
La alta dependencia de Alemania del
gas ruso (50% del consumo de la locomotora económica de Europa), aparece ahora
como una de las principales debilidades geoestratégicas de la Unión Europea en
el colosal tour de force con Rusia sobre el estatus de Ucrania.
Estados Unidos entiende que si cede en
la cuestión de Ucrania, China lo leería como una señal de debilidad y podría
aventurarse a invadir la isla de Taiwán, poniendo en cuestión la hegemonía
norteamericana en el Pacífico. Después de haber concentrado una enorme fuerza militar
en la frontera con Ucrania, Vladímir Putin no puede retirarse sin haber
obtenido contrapartidas. Nada se resolverá en quince minutos. Se avecina un
largo proceso de negociación y tensiones.
Alemania, interesada en diversificar
sus fuentes y mira a España y el Magreb
En este contexto ha empezado,
frenéticamente, la búsqueda de alternativas a corto, medio y largo plazo.
Estados Unidos intenta crear una coalición de exportadores de gas licuado para
reforzar los envíos a Europa. El gas licuado exige estaciones de regasificación
y la península Ibérica tiene ocho: siete en España y una en Portugal. El 30% de
la capacidad de almacenamiento de gas licuado en Europa se halla en España.
Solo hay un problema: falta más tubo.
Las conexiones transfronterizas con
Francia son débiles. No existe un Iberian Stream con capacidad para 55 bcm de
gas (55.000 millones de metros cúbicos al año). Existen dos conexiones a través
del País Vasco y Navarra que suman 7 bcm. El Midcat, la proyectada conexión
desde Catalunya, aportaría, como mínimo, otros 7 bcm.
Con un coste estimado de 400 millones
de euros, el Midcat quedó enterrado hace tres años por decisión de la Comisión
Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la Comission de Régulation
de l’Énergie. Los reguladores español y francés estimaron que esa instalación
no sería rentable en un contexto de rápida sustitución del gas por las energías
renovables. Portugal protestó. Portugal quiere esa conexión y desea intervenir
más en el cuadrante del Magreb. Esta va ser una de las banderas del nuevo
gobierno de António Costa .
MIDCAT. El proyecto del
corredor mediterráneo del gas, anulado hace unos 3 años, puede ser revisado
La asamblea general de la OTAN se
reunirá en Madrid en junio.
Fuente:
La Vanguardia.com