El 60 por ciento de las personas de entre 13
y 64 años experimenta algún tipo de problema al dormir. El uso de la tecnología
tiene bastante culpa en algunos casos. Por ejemplo, el 95 por ciento usa
dispositivos electrónicos una hora antes de acostarse, algo que no es
recomendable.
Los problemas de sueño se han relacionado
con enfermedades cardiovasculares, la depresión, la obesidad y la diabetes.
Asimismo, la luz que emiten las pantallas de tabletas y otros dispositivos
similares por la noche interrumpe los ciclos naturales del reloj biológico.
Según una infografía creada por Big Brand
Beds con datos de Pew Research, Sleep Foundation y noticias de diversos medios
de comunicación, el 95 por ciento de las personas de entre 18 y 29 años duerme
con el móvil pegado a la cama y el 50 por ciento responde a llamadas y mensajes
inmediatamente si está todavía despierto.
Los videojuegos y la televisión tampoco se
salvan. La luz de las pantallas en ambos casos impide mantener unos ciclos de
sueño regulares, como ocurre con otros dispositivos. Además, la televisión
altera el ritmo cardiaco, mientras que los videojuegos producen estrés, por lo
que tampoco es recomendable jugar justo antes de ir a la cama.
Más información