En 2017 ha sido el primer año en el que las
ventas de telefonía móvil han descendido en todo el mundo y todo apunta a que
vamos a entrar en un periodo mucho menos dinámico. La tendencia se ha empezado
a notar en los pasillos del recinto ferial de la ciudad, que repetirá como sede
en la próxima edición.
LO MEJOR
Samsung Galaxy S9. El
protagonista indiscutible de la feria. En las últimas ediciones Samsung se
había guardado la presentación de su móvil estrella para un evento propio,
normalmente celebrado unas semanas después de la cita pero la vuelta a
Barcelona ha sido triunfal. Es una buena evolución del S8, con mejoras en la
cámara -lo que se le pide a un teléfono de gama alta estos días- y algunas
funciones interesantes como la grabación a cámara superlenta.
Aura. La primera
manifestación de lo que en Telefónica conocen como cuarta plataforma será este
asistente virtual que se podrá ver en varias aplicaciones y productos a lo
largo del año y que hará más fácil usar los servicios del operador.
Técnicamente se anunció el año pasado pero ha sido en esta edición cuando por
fin se han tenido datos concretos de qué es y qué pretende hacer con ella la
operadora.
Xperia XZ2 Compact. A
los Xperia de Sony les hacía falta un cambio de diseño y este año por fin lo
han recibido. Tanto el XZ2 como el XZ2 Compact son ahora teléfonos que no
desentonan con el resto de la gama alta del mercado: buenos altavoces, buenas
cámaras y un ratio de pantalla 18:9. El más atractivo, sin duda, el pequeño de
sólo cinco pulgadas. Pocos fabricantes de Android se atreven a poner buenas
prestaciones en teléfonos tan compactos y no todo el mundo busca móviles
gigantes.
Nokia sabe pelear. El
fabricante HMD Global, propietario de la marca Nokia, ha cerrado un buen año
con más de 70 millones de teléfonos vendidos y demostrado que Nokia tiene aún
una oportunidad en el mercado. Ha resucitado, como el año pasado, un móvil
clásico para conseguir titulares y atención (8110) al tiempo que toma
posiciones en la gama media y baja del mercado con propuestas competitivas y
buenos diseños. Este año incluso se anima con la gama alta y un móvil de doble
cámara y pantalla curva.
LO PEOR
El tiempo. La ola de
frío siberiano que ha afectado a Europa ha convertido este Mobile World
Congress en una cita algo incómoda para los asistentes, sobre todo para stands
como el de Google, que estaban situados al aire libre. Barcelona ha recibido
estos días a cientos de miles de visitantes que no han podido disfrutar como en
años anteriores de terrazas y paseos por la ciudad.
Pocas novedades en
telefonía. La organización debería dar las gracias a Samsung y Sony. Sin ellos,
este Mobile habría quedado muy cojo en el apartado de hardware.
Mucha ceja. Apple
nunca acude al Mobile World Congress pero su sombra es alargada. La que
proyecta la ceja del iPhone X, al parecer, lo es más. Mucha imitación del
iPhone X en el catálogo de los fabricantes asiáticos, tanto en la famosa
"ceja" como en los animojis.
A la espera de 5G.
Mucho 5G en los discursos de la feria y los pabellones pero poca información
práctica sobre cómo y cuándo podremos ver despliegues comerciales. No es culpa
de las operadoras ni del congreso, claro. El estándar del 5G seguirá en el aire
unos meses más y sin un acuerdo de mínimos en la tecnología y sin licencias
adjudicadas no tiene sentido empezar a hacer grandes despliegues. La espera,
sin embargo, hace que muchas de las promesas de la evolución de las redes de
telefonía actuales parezcan más humo que otra cosa.
Fuente: El Mundo.es