Después de haber utilizado muchos 'wearables', he identificado cuatro funciones que son más cómodas de usar que en un 'smartphone' o que directamente en un teléfono son imposibles.
Estas cuatro
funciones dan sentido a un 'smartwatch' y el Apple Watch que presentó ayer la
compañía estadounidense cuenta con todas ellas, a pesar de no haber mostrado
nada realmente revolucionario en el terreno de las aplicaciones:
- Monitorizar sueño/actividad, porque siempre llevas este tipo de dispositivos encima. Antes de la llegada de los 'wearables' había utilizado aplicaciones de este tipo para el móvil. Pero como en determinadas situaciones resulta incómodo -o directamente imposible- llevar el teléfono encima, nunca había hecho un uso tan constante ni motivador como el que me he encontrado en los dispositivos que se llevan encima.
- Responder correos y mensajes de forma rápida, cuando es urgente y te viene mal coger el móvil. No obstante, me pregunto hasta qué punto será abierta esta función en el Apple Watch y si en el futuro se podrán contestar todo tipo de aplicaciones de mensajería, como WhatsApp o Telegram, y no solo los correos o mensajes en las aplicaciones de Apple.
- Controlar música de forma remota, ya que eso permite que mantengamos el móvil en el bolsillo o lo tengamos enchufado a un altavoz, mientras pausamos, avanzamos o retrocedemos la reproducción desde la muñeca. Sin duda, es una de las funciones estrella de un 'smartwatch', puesto que permite al teléfono funcionar como "cadena de música" y al reloj como mando a distancia.
- "Manos libres". Poder hablar directamente al reloj sin tener que coger el móvil me parece particularmente útil en tres escenarios: cuando tenemos el teléfono en la otra punta de la casa, estamos cocinando o conduciendo. Cuando llevo un 'smartwatch' con esta función, la utilizo a diario. Realmente me ha alegrado que Apple haya incorporado esta función.