Comparativamente, el fabricante de chips “sólo” ha
aumentado 10 veces la eficiencia energética de sus unidades de procesamiento
acelerado desde 2008.
Y es que la intención de la compañía americana, según
ha anunciado su director de tecnología, Mark Papermaster, es aumentar la
eficiencia de sus unidades de procesamiento acelerado (más conocidas como APUs)
hasta 25 veces de aquí al año 2020, en lo que ha dado en bautizar como objetivo
25X20.
Esto significa, por lo tanto, asumir un mayor número de
dificultades que en los seis años anteriores, ya que de 2008 a la actualidad la
eficiencia energética de las APUs de AMD también se ha multiplicado, pero
“sólo” por diez. Al mismo tiempo, supone rebasar lo predicho por la famosa Ley
de Moore en un 70%.
¿Y cómo lo hará? En sus propias palabras, básicamente
“a través de la gestión eficiente de la energía y los avances arquitectónicos
de la APU, en conjunto con las mejoras tecnológicas del proceso de fabricación
de semiconductores y un foco en energía típica”.
Por una parte, AMD quiere seguir apostando por la
“arquitectura de sistemas heterogéneos”, reduciendo así las conexiones que se
producen entre chips. Por otro, se encargará de limitar la energía destinada a
tiempos de inactividad. Y, a mayores, promete continuar invirtiendo en tareas
de investigación y desarrollo para descubrir nuevas soluciones con las que ser
más eficientes.
Fuente: Silicon Week.es