Según las últimas
filtraciones el FBI está estudiando proponer una ley dentro de Estados Unidos
que permita a la organización gubernamental hackear los ordenadores de los
usuarios que accedan a la red a través de la red Tor o de un servidor VPN que
cifre el tráfico e impida ser rastreado e identificado por esta organización.
La ley que el FBI estudia
aplicar se define como la posibilidad de obtener una orden de registros
electrónicos sin proporcionar detalles específicos de todos los sistemas y
dispositivos que oculten su identidad y ubicación real en la red.
Esta nueva ley también
podría permitir el registro electrónico de los ordenadores que puedan haber
sido víctimas de algún ataque informático y dañados de manera no intencionada
(a través de una botnet, un malware, un virus, etc).
Toda la información que se
recopile de los ordenadores registrados electrónicamente podrá ser utilizada
por los organismos de seguridad correspondientes sin necesidad de especificar
el fin, aunque esta información se almacene dentro o fuera de su jurisdicción.
Aunque en teoría el FBI
sólo debería actuar con los ciudadanos de Estados Unidos y que estén conectados
a servidores alojados en su país, no sería la primera vez que otras
organizaciones como la NSA ataca servidores fuera de Estados Unidos, incluso es
posible que los diferentes gobiernos alrededor del mundo puedan apoyar la
iniciativa de la organización de seguridad estadounidense y permitir que la
organización ataque sistemas en sus correspondientes países e incluso que sean
las organizaciones gubernamentales de seguridad de cada país quienes aprueben
leyes similares que les permitan atacar y acceder a los sistemas que se
conecten a la red ocultando su identidad a través de Tor o VPN.
Fuente: Slashdot.org