El
regulador de calidad de China dijo el miércoles que una unidad local de Samsung
Electronics Co Ltd llamará a revisión 1.858 unidades de su Galaxy Note 7,
después de que se encontrara que algunos teléfonos móviles de la firma
surcoreana tenían baterías que podían incendiarse.
Samsung
detuvo las ventas a principios de este mes del teléfono Note 7 en 10 mercados,
incluyendo Corea del Sur y Estados Unidos, pero no en China, donde dijo que el
modelo estaba equipado con baterías de un proveedor diferente.
Los
teléfonos llamados a revisión se vendieron en algunas partes de China a través
de un sitio web oficial de Samsung antes de su lanzamiento el 1 de septiembre
como parte de un esquema de pruebas, dijo el regulador en su página en
internet.
Samsung,
el mayor fabricante mundial de teléfonos inteligentes, instó a los usuarios del
Galaxy Note 7 a que cambien el producto, en medio de una ola de anuncios
publicitarios de la empresa en Corea del Sur disculpándose por el problema.
Una
serie de advertencias de los reguladores y de las compañías aéreas de todo el
mundo incrementó los temores sobre el futuro del emblemático dispositivo y ha
golpeado duramente las acciones de Samsung.
También
el miércoles, la autoridad de aviación civil de China dijo que prohibirá el uso
y la carga del Galaxy Note 7 en los vuelos, y que no permitirá a los pasajeros
llevarlos en el equipaje facturado.
Fuente:
Reuters