Hay muchos que no quieren actualizar su sistema, de ahí que hayan procedido con anterioridad al bloqueo de la KB3035583.
Apareció por primera vez a mediados de 2015 y justo antes
de que se lanzara de forma oficial la última creación de los de Redmond. Pero son muchos los usuarios que no quieren pasar por
el proceso, sobre todo para evitar problemas de compatibilidad de aplicaciones
que necesitan para trabajar. Pero ya se sabe que el bloqueo de la misma no
garantiza que esta no se publique de nuevo por parte de Microsoft y a partir
del 24 del pasado mes está de nuevo disponible e instalándose de forma
automática (si el usuario lo tiene configurado así) en los sistemas operativos
7 y 8.1.
Por desgracia para muchos, tras proceder a su eliminación y controlar que no apareciese la configuración de Windows Update la habían modificado a instalar actualizaciones de forma automática, encontrándose con que la aplicación que permite la migración a Windows 10 está instalada en el equipo.
La mejor noticia para los usuarios es que la llegada de
julio cada vez está más cerca, ya que es el momento en el que Microsoft
finaliza su campaña para que los usuarios con sistemas operativos anteriores
migren de forma gratuita a este nueva, siempre y cuando posean una clave de
producto legítima.
¿Cómo bloquear KB3035583 de forma
definitiva?
- A día de hoy la única opción fiable para llevar a cabo el bloqueo de esta es utilizando la aplicación de terceros GWX Control Panel, permitiendo de una forma sencilla realizar esta tarea y otras relacionadas con la gestión de los sistemas operativos.
- Lo realmente molesto de esta actualización no es que se instale una aplicación para migrar a otro sistema operativo, ya que si esta permaneciese inactiva no sucedería nada. El problema es que es bastante intrusiva y a lo largo de un día el usuario puede visualizar varias veces el mensaje invitando a una migración. Es realmente este el principal motivo junto con no querer actualizar por el que los usuarios llevan a cabo el bloqueo de esta actualización y que no se instale en el sistema.
- Tras los primeros seis meses de vida del sistema operativo, desde Microsoft se deben mostrar satisfechos con los resultados obtenidos, ya que hay una gran cantidad de usuarios que hacen uso de su nuevo sistema operativo y que han procedido a la actualización desde otro sistema operativo antiguo.