Apple ha presentado esta semana en su conferencia mundial de desarrolladores WWDC la nueva versión de sus sistema operativo para móviles, iOS 9.
Los desarrolladores de aplicaciones van a tener en su mano el
poder de consolidar la frontera que marcará un antes y un después entre las
generaciones de dispositivos móviles Apple al poder elegir libremente si dejan
de ofrecer soporte para dispositivos anteriores a la salida de iOS 9.
Una de sus capacidades es la de permitir a dispositivos de
generaciones anteriores un funcionamiento más fluido en comparación con
anteriores actualizaciones de iOS que en ocasiones daban problemas con los
modelos más veteranos de la manzana mordida. Esto podía disuadir a algunos
usuarios de adquirir nuevos iPhone/iPad pero con la noticia de que no se
producirán esos problemas con iOS 9 los propietarios de terminales con unos
cuantos años a sus espaldas se las prometían muy felices.
Hasta que se ha descubierto que en paralelo Apple habría
permitido que los propios desarrolladores de aplicaciones puedan elegir dejar
de dar soporte a la generación anterior (32 bits). Y la barrera estaría por
tanto en el primer iPad Air, pionero en la arquitectura de 64 bits dejando
atrás la de 32 emplean las cuatro primeras generaciones del tablet de Apple.
Los desarrolladores encontrarían un incentivo en el abandono
de las apps para dispositivos de 32 bits por el coste adicional que supone
trabajar para modelos de generaciones anteriores que gradualmente van
quedándose obsoletas y contando con cada ves menos usuarios.
En el caso de los iPad serían los dos modelos de Air y los Mini 2 y 3 los afortunados y en cuanto a los smartphones de la marca, el iPhone 5S sería el primer modelo con arquitectura 64 bits por tanto todos los anteriores quedarían “fuera de juego”