Según Reino Unido y
EE.UU., Rusia ha dirigido una ofensiva de hacking global contra millones de
ordenadores para espiar a los gobiernos y sentar las bases para un ataque a la
infraestructura
Apenas unas horas
después de la intervención militar en Siria por parte de Estados Unidos, Reino
Unido y Francia, millones de ordenadores británicos y norteamericanos sufrieron
un intento de hackeo orquestado desde Rusia.
Esto es lo que han
advertido tanto el Centro Nacional de Ciberseguridad de Gran Bretaña como el
Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos. Una ofensiva de «hacking
global» que, aseguran, podría haber afectado a decenas de miles de dispositivos
en los hogares británicos, incluyendo ordenadores privados.
Algo que, según estas
organizaciones, buscan desde Rusia para espiar a los gobiernos y sentar las
bases de un posible ciberataque masivo en un futuro.
Los expertos en
seguridad advierten de que los hackers, a los que relacionan con el Kremlin,
están buscando formas para colarse de forma invisible en los ordenadores de los
usuarios con contraseñas fáciles o con antivirus caducados en sus ordenadores
para lanzar un ataque global cuando se les de la orden de hacerlo. En su punto
de mira también se sitúan las grandes y medianas empresas, aunque la mayoría de
los intentos rusos se han dirigido directamente al gobierno británico y a
elementos críticos de la infraestructura nacional del país.
La capacidad de
controlar las redes y los dispositivos domésticos que se conectan a Internet
significa, acorde a los técnicos, que Rusia puede lanzar ciberataques en los
que podría incluso impedir la prestación de servicios como atención médica, o
los suministros de energía y de agua. Estos organismos de seguridad advierten
además de que si no se ponen los medios necesarios para evitarlo los hackers
puede interceptar mensajes privados entre dos personas e incluso eliminar o
distorsionar su contenido.
La directora del
Centro de Nacional de Ciberseguridad en Reino Unido, Ciaran Martin, aseguraba
que era necesario justo ahora «advertir sobre las actividades de Rusia en el
ciberespacio».
Desde Estados Unidos
amenazan con que están dispuestos a devolverle el golpe a Rusia con operaciones
similares. Así lo señalaba Rob Joyce, el coordinador de seguridad cibernética
de la Casa Blanca «todos los elementos del poder de Estados Unidos están
disponibles para hacer retroceder este tipo de intrusiones», afirmaba.
Es la primera vez que
se da una «alerta técnica» tanto en Reino Unido y Estados Unidos y que se
difunde entre el público, los gobiernos y las empresas privadas, incluidos los
proveedores de servicios de Internet y otras empresas de comunicaciones.
Desde Gran Bretaña se
lleva varios meses alertando contra estos ciberataques y sobre las intenciones
de Vladimir Putin de sembrar de noticias falsas, las conocidas como fake news,
y de desinformación las redes sociales y los medios de comunicación para
intentar influir en decisiones tan importantes para el país como el brexit o
las elecciones generales.
Fuente: Abc.es