El Tribunal
Regional de Frankfurt (Alemania) ha impuesto una medida cautelar contra el
servicio de transporte Uber que obliga a la empresa a suspender su actividad en
el país debido a que la Corte considera que Uber no tiene los permisos
pertinentes para operar.
De esta forma,
desde este martes, Uber no podrá trabajar en el país germano, ya que saltarse
la orden de suspensión podría acarrear multas de hasta 250.000 euros y prisión
para los directivos de la 'startup' en caso de incumplimiento sistemático de la
orden.
Además, los
jueces también consideran que no es sólo Uber la que incumple las normativas
vigentes sobre transportes de pasajeros, sino los conductores, quienes operan
"sin estar en posesión de un permiso de conformidad con la Ley de
Transportes de Pasajeros", según ha informado el diario local Frankfurter
Allgemeine.
Esta no es la
primera vez que la 'startup' americana tiene problemas legales en Alemania,
aunque ha ganado los procesos abiertos en las ciudades de Berlín y Hamburgo. En
ambos casos, Uber sostuvo que los conductores del servicio no forman parte de
su plantilla y que, por lo tanto, no se haría responsable de las multas de
éstos.
En Alemania,
Uber opera en las ciudades de Berlín, Munich, Frankfurt y Dusseldorf, y sus
planes de ampliación de su servicio pasan por Colonia, Stuttgart, en el corto
plazo; y Nuemberg, Bonn, Essen y Dortmunt, en un futuro.
Fuente: Europa Press