8 de octubre de 2021

FUTBOL. Una superliga para jeques y otra para quienes cumplan y respeten, derechos humanos y fair play financiero

 

El último caso ha ocurrido hace unos días, cuando la Premier League dio 'luz verde, a que Mohammed bin Salman, comprase el  Newcastle United Football Club a través del fondo Public Investment Fund (PIF) por 350 millones de euros.

Una operación que podría poner a las 'urracas' a la altura del Manchester City o del Paris Saint-Germain... pero que, de momento, tiene tantas luces como sombras


Por el lado de las luces y respecto al fulgor del vil metal

Gana con diferencia a todos sus competidores, pues su fortuna está valorada en unas novecientas veces el dinero que le ha costado el Newcastle.

Puesto que, tras este fondo, que ha 'probado' ser independiente de la 'corona', asoma la figura de Mohammed bin Salman. El príncipe heredero de Arabia Saudí, de 36 años, y su familia cuentan con una fortuna de 320.000 millones de euros.

Pero por el lado de las sombras, ¡Ay! por el lado de las sombras.

En su expediente, consta una 'sombra' enorme que le persigue. "Un informe de inteligencia de Estados Unidos implica al príncipe heredero de Arabia Saudita en el asesinato del periodista Jamal Khashoggi, ocurrido en 2018. El reporte desclasificado, que fue divulgado por el gobierno del presidente Joe Biden, señala que el príncipe aprobó un plan para capturar o matar a Khashoggi", relata la 'BBC', que sin embargo, Bin Salman lo niega, faltaría más.

Cabe recordar que Khashoggi, de 59 años, acudió al consulado de Arabia Saudí en busca de unos documentos para formalizar su matrimonio. Nadie le volvió a ver con vida. Se dijo que había muerto de sobredosis, pero la investigación apunta a que fue descuartizado vivo en el consulado

De hecho, la viuda de Khashoggi, condenó la venta del Newcastle cuando parecía que se iba a llevar a cabo en un primer momento en abril de 2020. "Arruinaría la buena reputación de la Premier League, ya que esta adquisición repararía la posición de las autoridades saudíes en el panorama internacional", escribió en una carta que envió a la Liga inglesa Hatice Cengiz a través de sus abogados.

Amnistía Internacional ha manifestado al respecto que "en lugar de permitir a aquellos implicados en la violación de los derechos humanos entrar en el fútbol sólo porque tienen dinero, instamos a la Premier League que cambie sus políticas de dueños y presidentes para que se adecúen a los derechos humanos", lamentó en un comunicado.

EDITORIAL

La Premier League, en mi opinión, debería entender que no todo vale en el futbol, y que, campeonato de futbol y democracia más antiguos del mundo, no se pueden permitir, blanquear a países que atentan contra los derechos humanos, puesto que el daño reputacional podría ser irreparable.

Fuente: Marca.com