Microsoft, mediante un artículo en TechNet, ha anunciado cambios en su
política de tolerancia respecto al adware, ese software muchas veces molesto
que se encarga de mostrar publicidad en nuestro ordenador. Como esas
aplicaciones que obligan a que la página de inicio de nuestro navegador la
elija una aplicación externa y que “se ha colado” al instalar otro programa,
por poner un ejemplo.
Hasta ahora, cuando los productos de seguridad de Microsoft detectaban
adware, lo dejaban ejecutarse hasta que el usuario dijera lo contrario. A
partir del primer día de julio será justo a la inversa: cuando lo detecten, lo
pararán, y solo volverá a la vida si el usuario así lo indica explícitamente.
Aunque, ¿qué es exactamente el adware para Microsoft? Lo explican muy
claro: software que muestra publicidad fuera de su propia interfaz, de sus
propios límites. Por ejemplo, mostrando pop-ups en Internet Explorer. Este
adware, por cierto, debe seguir una serie de reglas para ser “admisible”.
Por ejemplo, este adware debe mostrar un modo sencillo e intuitivo para
ocultar la información que muestre, debe mostrar claramente (y no mediante
abreviaturas o dando rodeos) el nombre del programa que está generándolo, y
debe aparecer en el Panel de Control de Windows como una entrada independiente
que permita desinstalarlo, o al menos en el panel de “Extensiones” del
navegador que corresponda.
Sin duda un movimiento inteligente por parte de Microsoft y que, sin
duda, mejorará la experiencia de usuario de muchas de las personas que utilizan
sus productos en sus ordenadores.
Más información
- Microsoft Malware Protection Center Blog http://blogs.technet.com/b/mmpc/archive/2014/04/03/adware-a-new-approach.aspx