21 de noviembre de 2015

CIFRADO Y FIRMA ELECTRONICA.Vuelven a activarse en el mercado español

Quedan muchas asignaturas pendientes de aprobar en España en materia de cifrado y firma digital. En nuestro país, las grandes empresas empiezan a desarrollar iniciativas proactivas de gestión online con la Administración pero “acabamos de empezar” como quien dice.
Durante estos años de crisis económica los procesos de implantación y puesta en marcha de la facturación electrónica, del uso de los certificados digitales y de la firma electrónica avanzada en España, han estado prácticamente paralizados o relegados a un segundo plano.
Frente a ser pioneros, hace unos cuantos años, en proyectos innovadores como el DNI electrónico, la recesión nos ha colocado en el puesto de cola, consecuencia de las restricciones presupuestarias y la paralización de muchos proyectos, tanto en el sector público como en la empresa privada.
Sin embargo, durante estos últimos años, economía y sociedad se perciben cada vez más digitales siendo en ambos casos conscientes de la necesidad de implantar estas tecnologías como una medida para proteger la información y la identidad, así como un instrumento para agilizar los procesos, reducir costes y contribuir a un mundo más sostenible.
Además, en el marco político, proyectos como el nuevo reglamento europeo para la interoperabilidad de la firma electrónica avanzada en el ámbito comunitario, o el impulso del actual Gobierno en iniciativas como los futuros juzgados sin papel, entre otras iniciativas, constituyen un elemento tractor para que España avance hacia la usabilidad de la firma digital y del cifrado de la información aplicado a procesos como la factura electrónica.
El proceso es imparable
  • Jesús Rodríguez Cabrero, presidente y CEO de REALSEC, incide en que en estas tecnologías las empresas españolas todavía tienen mucho por hacer: “Nos hemos quedado atrasados tanto en relación con algunos países de Europa como de América Latina. Por ejemplo, en México comenzaron el proceso de implantación de la facturación electrónica hace casi 6 años y es de obligado cumplimiento desde enero del año 2014. Todas las empresas mexicanas grandes, medianas y pequeñas ya facturan electrónicamente, utilizando criptografía (HSM, Hardware Security Module) para importar de forma segura y custodiar las claves de los certificados digitales emitidos por el SAT (Secretaría de Administración Tributaria)” a las empresas para que puedan facturar electrónicamente.
  • Frente a esto, en España la mayoría de las grandes y medianas empresas de nuestro país, a pesar de la legislación en torno a esta materia, no han podido o no se han planteado abordar la implantación de la facturación electrónica y el uso de la firma digital aplicada a sus procesos de negocios, al menos hasta este momento.
  • La mayoría de las empresas son conscientes de que para garantizar que las transacciones sean confiables y seguras, el cifrado asimétrico es una de las tecnologías más idóneas. “El uso del cifrado y de la firma electrónica avanzada se configura como el mejor instrumento de protección para avanzar en el desarrollo de la administración y de la economía digital y los múltiples beneficios que esto conlleva, tales como la agilidad en los procesos, la reducción de costes o la contribución para la protección del medio ambiente mediante la eliminación del papel”, especifica Rodríguez Cabrero.
  • En este momento, en nuestro país existe un gran número de empresas, que desde hace bastante tiempo piensan y actúan en digital- desarrollando iniciativas proactivas de gestión online: liquidación de impuestos a la AEAT, presentación de cuentas anuales ante el Registro Mercantil etc. Sin embargo, queda mucho por hacer si realmente queremos alinearnos y apostar por el desarrollo socioeconómico digital.
Fuente: Silicon Week.es