Una
jueza federal desestimó una demanda que acusaba a Google de perjudicar a los
clientes de teléfonos avanzados, al forzar a los fabricantes de dispositivos
móviles que usan Android como sistema operativo a tener como opción por defecto
las propias aplicaciones del motor de búsqueda.
Los
consumidores reclamaban que Google exigía que compañías como Samsung
favorecieran aplicaciones como Youtube en teléfonos con Android, y
restringieran apps rivales como el buscador de Microsoft, Bing.
Alegaron
que esto aumentó ilegalmente los precios de los teléfonos avanzados porque los
rivales no podían competir con el "espacio en la pantalla principal"
que disfrutaban las aplicaciones de Google.
Pero en
una decisión tomada el viernes, la juez de distrito Beth Labson Freeman de San
José, California, dijo que los consumidores no habían sido capaces de demostrar
que el alza de precios derivara de una decisión de Google de forzar ilegalmente
contratos restrictivos con los fabricantes de dispositivos móviles.
Dijo
también que no sabía cuántos niveles existían en la cadena de distribución
entre los fabricantes de dispositivos que habían firmado los contratos
supuestamente anticompetitivos y los propios consumidores.
"Sus
supuestos perjuicios - precios sobrecompetitivos y amenazar la innovación y la
libertad del consumidor - no son medios necesarios por los cuales la demandada
está llevando a cabo sus fines anticompetitivos", sostuvo Freeman.
La
jueza dio a los demandantes tres semanas para modificar sus reclamaciones bajo
la ley antimonopolio y la ley de competencia del estado de California.
Fuente:
Reuters.