Son dos formas bien distintas de encarar la corrupción. El PSOE expulsando a Ábalos del grupo socialista, mientras el PP tapa la corrupción interna en su partido.
Por qué hay que ver como está Madrid, ¿lleno
de luces navideñas? pues sí, que también, pero el problema de la luminosidad es que
permite ver lo que está oculto. ¿Se acuerdan de aquel consejero de la comunidad
de Madrid, que no veía a los pobres ni
siquiera bajo su mesa, pues según informes de oneges, en Madrid abundaban más los pobres que las amapolas? ¿Y de las universidades públicas madrileñas, para cuando las cierran todas? Por
no hablar de los Centros de Salud o las residencias de ancianos, que en los primeros, las colas son más largas que las del hambre, y respecto las residencias de mayores casi están vacías después de enterrar a tantos pobres ancianos que condenó
a morir sin atención médica durante la pandemia. Y sin entrar en el nepotismo
de la presidenta de Madrid ¿ Y qué me dicen de la corrupción madrileña, si parece un mal endémico
de Madrid?.
Si es que ya lo dicen los castizos, ¡hay que, hay que ver, hay que ver! como está el Madrid de Ayuso ¿de exposición? Sí, pero como ejemplo de lo que nunca debe hacer un gobernante democrático, que los principios morales, no son precisamente en lo que más destaca la señora Ayuso. Ella es más bien, una fiel defensora del trumpismo ultraliberal, llegando a dar la impresión que con mayoría absoluta en la Comunidad de Madrid, se otorga licencia para delinquir impunemente, como si fuese la reina de Madrid, o como una especie de agente 007 a la madrileña. Y los jueces lo saben, porque actúan en consecuencia.
Ahora entiendo por qué no quiere gobernar Feijóo, porque no lo necesita, pues él no es persona de hacer trampas ni de mentir sobre la corrupción, a excepción de lo de Ayuso, lo de su esposa, lo de su hermana, lo de su cuñado, ......, etc., etc.. En el resto de casos, siempre es fiel a su palabra y nunca delinque.
Contexto de
la corrupción en la Comunidad de Madrid.
La Comunidad de
Madrid ha sido epicentro de numerosos escándalos políticos y judiciales
relacionados con la corrupción, destacando casos como el "Tamayazo" , "Gürtel", "Púnica", "Lezo" y
"Pisazo".
La trama Gürtel
implicó a figuras prominentes del Partido Popular (PP), involucrando sobornos,
contratos amañados y financiación ilegal de campañas.
Otros casos, como
Púnica y Lezo, han expuesto prácticas corruptas dentro del PP, afectando tanto
a altos cargos del gobierno regional como a figuras cercanas a la expresidenta
Esperanza Aguirre y su sucesora Cristina Cifuentes
También la actual
Presidenta madrileña está siendo investigada por el presunto desvío de fondos europeos,
y por supuesta negligencia en la desatención sanitaria, con resultado de muerte, para los ancianos en
residencias de mayores durante la pandemia.
La gestión del PSOE
frente a la corrupción.
El PSOE, principal
partido de oposición en Madrid, ha actuado con "tolerancia cero"
hacia la corrupción, ejemplificado por la expulsión de Ábalos del grupo
socialista después de las acusaciones que lo involucraron.
La rapidez con la que
el PSOE apartó a Ábalos del partido contrasta con la actitud del PP, que ha
mantenido a varios implicados en escándalos de corrupción dentro de sus filas.
La actitud
del PP frente a la corrupción.
A diferencia del
PSOE, el PP ha sido criticado por encubrir a decenas de cargos implicados en
diversas causas judiciales. Se han mantenido en el poder a pesar de las
acusaciones y las investigaciones judiciales.
El PP ha sido acusado
de defender a sus corruptos, pagando abogados con dinero del partido y negando
su implicación en las tramas corruptas, como en el caso Gürtel, donde Mariano
Rajoy defendió al partido a pesar de las condenas.
Prácticas
del PP para manejar la corrupción.
El PP ha utilizado
tácticas como el encubrimiento, la mentira y la evasiva, negando la implicación
del partido en los casos de corrupción y atacando a las instituciones
democráticas que investigan estos hechos.
Rajoy, como líder del
PP, intentó minimizar los escándalos y deslegitimar a los jueces que
investigaban las tramas de corrupción, mostrando un comportamiento protector
hacia los miembros del partido implicados.
La
situación actual del PP.
A pesar de los
escándalos, el PP sigue sin acometer medidas efectivas de regeneración, y no se
ha sancionado a sus miembros implicados en corrupción de forma contundente.
Más de treinta causas
por corrupción siguen persiguiendo al Partido Popular después de cinco años. El
ejercicio que se cierra ha conocido al menos 30 sumarios como Gürtel, Lezo,
Púnica, Erial, Taula, Tándem y otros con varias decenas de exdirigentes populares
procesados.
A la que ahora, parece ser, se va a sumar la causa contra el President de la Genelaritad valenciana, Carlos Mazón, tras la petición del fiscal de abrir diligencias de investigación, por las siete denuncias que se integran en una sola querella (las siete denuncias forman parte de una especie de macroquerella, después que, la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, acordara acumularlas en la misma causa), entre las que se encuentra investigar la ausencia de Mazón, en las primeras horas de la dana del 29 de octubre que retrasó casi 10 horas lanzar la alerta para toda la Comunidad y pudo influir en los 223 muertos, que hubo ese día en Valencia.
La corrupción sigue siendo un tema central en el partido popular, y el actual líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, parece ignorar que la corrupción podría afectar negativamente al partido en elecciones futuras.
CONCLUSIÓN
De lo aquí expuesto se deduce la gran diferencia entre las actitudes del PSOE y el PP frente a la corrupción, destacando la postura ética del PSOE y el encubrimiento y falta de acción del partido popular, lo que sigue alimentando la desconfianza pública en las instituciones políticas. Aunque en cierto sentido, entiendo al Sr. Feijóo, porque si echasen del PP a todos los implicados en casos de corrupción, igual no quedaba gente suficiente ni para echar una partida de mus.
A lo que se ve, el PP
prefiere tapar la corrupción con cenas de vino y rosas, que las espinas si tienen
que venir, que vengan. Por qué ellos son más, de enfrentarse al destino político con la
cabeza bien alta. Total, no se está tan mal en la oposición, pues se cobra igual. Y además, a lo hecho pecho, porque todo lo que hacen por
Dios y por España, hasta pagar la sede central del PP en Madrid con dinero
negro.
Fuente: Redacción