17 de noviembre de 2020

UNION EUROPEA. Los ultraconservadores bloquean presupuestos, europeos y españoles.

 Supongo que el Partido Popular español estará contento con ambos bloqueos de las cuentas europeas y españolas, porque para eso han estado trabajando largo tiempo. 

Igual me da, que me da lo mismo, que hablen de Bildu, de líneas rojas o de líneas negras, porque solamente era una distracción y cuanto me extraña que los varones socialistas entren al trapo, puesto que los Diputados de Bildu, ERC y la CUP, tienen la misma legitimidad que los de Vox, PP o PSOE, pues al igual que el resto de Diputados, han sido elegidos democráticamente por los españoles, ya que caso contrario ninguno tendría legitimidad.

Su objetivo, como ha quedado demostrado, es el bloqueo de los PGE en España y de los PGE en Europa, aunque en éste último caso, para hacer el trabajo sucio, se han servido del  presidente de Hungría,     -supongo que a casos así se refería el sr. Aznar cuando hablaba de “tonto útil” ¿o era “tonto inútil”?- al que el PP español, supuestamente por orden de su líder (que no está claro si es el sr. Casado) apoyó, al votar en contra de la  expulsión de su partido del Grupo del Partido Popular Europeo, quizás por considerarlo poco facha al lado de sus otros socios, los de Vox, aunque amigos parece ser que ya no son de éstos últimos. Quizás sea postureo. Veremos.

Esto marcha, dirán en la Internacional ultraconservadora.

“Esto marcha”, seguramente es lo que dirán, cuando se reuna la Internacional ultraconservadora (que seguro existe) para vanagloriarse lo que bien que va su nuevo proyecto “Arde Europa”, porque lo de hundir los presupuestos ya está en marcha, ahora solo les falta, que los republicanos de EEUU y los seguidores de Trump hagan lo mismo al otro lado del Atlántico, para que su éxito sea completo, y según tengo entendido están ello, por lo que cuentan en redes sociales y medios de comunicación.

Igual las cosas que en 1936

Las cosas han cambiado poco en casi 100 años, cuando la muerte asolaba España, por otra pandemia que había por aquel entonces (la de 1918) y las luchas intestinas por el poder.

Ahora en España, en medio de la segunda ola de la pandemia, los miserables de las derechas siguen despreciando a los muertos, por un puñado de votos.

Políticamente hablando, las cosas han cambiado poco, tras 80 años del final de la guerra civil, y de 40 años de democracia (personalmente, no veo grandes diferencias con el populismo de Trump en Estados Unidos, y con el odio con que premia a sus adversarios políticos y a los que no les votan), pues al igual que ocurrió en 1936 en España, las derechas pretenden deslegitimar a un gobierno socialista salido de unas elecciones democráticas, porque quieren patrimonializar España y a todos los españoles.

Es decir, una opa hostil en toda regla, por lo civil o por lo militar. Un golpe de estado parlamentario (como en Cataluña) o militar (como en 1936).

Lo único que de verdad les importa (y nunca se le olvide a nadie) es que el PP vuelva a gobernar, porque solo ellos están ungidos por Dios para gobernar y no este gobierno socialcomunista.

 Me recuerda la historia de Egipto, se imaginan al faraón Casado I o Abascal I, creo que suena raro hasta para un fascista.

En España somos más del Caudillo Casado o el Caudillo Abascal, suena mejor, ni que decir tiene,  porque a Aznar ya se le pasó el arroz para lo de Caudillo.

Fuente: Redacción