8 de julio de 2018

ALPHABET.Revolucionaría la energía limpia con dinero de Bill Gates

Todo parece indicar que la división X del gigante está negociando con el fondo de inversión centrando en innovación energética creado por el multimillonario de la informática. El objetivo sería desarrollar el 'Proyecto Malta', que crearía un almacén de sal fundida a escala comercial
X, la división de investigaciones arriesgadas de Alphabet, parece estar negociando la posibilidad de llevar a cabo el Proyecto Malta, que consistiría en la creación de una unidad de almacenamiento de energía de sal fundida. Esta operación incluiría al fondo de inversión Breakthrough Energy Ventures, creado por Bill Gates y dotado con cerca de 857 millones de euros .
No está claro si el acuerdo llegará a cerrarse y, en tal caso, tampoco se sabe cuánto dinero hará falta. Pero el investigador principal responsable del proyecto, el profesor de física de la Universidad de Stanford (EE. UU.) y ganador del Premio Nobel, Robert Laughlin, afirma que el acuerdo estaba incluido en el resumen de una charla que dio en la Universidad de Stanford (EE. UU.) a finales de mayo.
Laughlin afirma que dicho resumen menciona "el proyecto secreto de la división X llamado Proyecto Malta". También señala que una "patente clave" para la tecnología de sal fundida se emitió a principios de abril y añade que "la spin-off asociada al avance de Breakthrough Energy Ventures de Bill Gates ya está en marcha".
Sin embargo, la página fue retirada y  Laughlin dirigió las preguntas a Breakthrough Energy Ventures, que no respondió. Y un portavoz de X también se negó a comentar el asunto.
Además, resulta que el director de Inversiones de Breakthrough Energy Ventures, Phil Larochelle, ya trabajó con Laughlin en una empresa de almacenamiento térmico, es copropietario de varias de las patentes más importantes de la empresa y trabajó de responsable sénior de programas técnicos en la división X. Pero Larochelle tampoco respondió a las preguntas de MIT Technology Review.
El Proyecto Malta fue desvelado en una publicación en Bloomberg en julio del año pasado. El artículo mencionaba que el equipo estaba "buscando socios para construir y operar un prototipo de tamaño comercial y conectarlo a la red".
El sistema propuesto convierte la electricidad de las turbinas solares y eólicas en energía térmica, es decir, en una fuente de calor que se almacena en tanques gigantes de sales fundidas. Y también almacena frío en depósitos de líquido refrigerante. El enfoque podría aumentar la eficiencia y reducir los costes de cualquier sistema de almacenamiento térmico previo. Para ello, emplea un motor térmico que transfiere "el calor del lado caliente al lado frío para impulsar una turbina mecánicamente". Así lo afirma tanto la patente de abril como una explicación adicional presente en un artículo científico publicado por Laughlin sobre la tecnología.
Los investigadores creen que el enfoque les permitirá almacenar energía durante más tiempo del que permiten las baterías de iones de litio, y a precios competitivos con los de una central hidroeléctrica reversible. A día de hoy, esta es la forma de almacenamiento a gran escala más económica, según Bloomberg.
Encontrar formas de almacenamiento en la red más baratas y mejores es esencial para lidiar con fuentes de energías renovables fluctuantes como la eólica y la solar. Estas fuentes cada vez tienen un mayor peso en el mix de generación de electricidad.
Fuente: MIT Technology Review