Google y su filial Jigsaw están
uniendo fuerzas para defender de manera gratuita a los organizadores de
elecciones y a los grupos civiles contra los ciberataques, en momentos en que
la industria tecnológica busca atenuar las críticas de que no hace suficiente
para detener las distorsiones de los procesos electorales.
La cada vez mayor frecuencia de
ciberataques con motivaciones políticas -desde el reciente pirateo de las
cuentas de Twitter por parte de nacionalistas turcos hasta la filtración de los
correos del Partido Demócrata estadounidense- han puesto a gobiernos y grupos
prodemocracia en una complicada situación a la hora de enfrentar a
"hackers" y las noticias falsas.
Jigsaw y Google, ambas propiedad de
Alphabet Inc, están ofreciendo el paquete "Protect Your Election"
("Protege tus elecciones") a organizaciones con presupuestos
pequeños. El servicio para prevenir ataques cibernéticos ya se ofreció durante
el año pasado a medios de comunicación en el marco del Project Shield
("Proyecto escudo").
Jigsaw, que desarrolla herramientas de
seguridad para grupos civiles, se unió a Google la semana pasada en la defensa
de una web de información para votantes que sufrió un ciberataque durante las
elecciones en Holanda.
Las páginas web KiesKompas y
Stemwijzer -utilizadas por la mitad de los votantes holandeses para ver qué
partidos encajan mejor con sus posiciones políticas- se cayeron ante un
torrente de tráfico digital el 14 de marzo, que se disparó un día después
cuando se realizaron las elecciones.
"El ataque no fue un juego de
niños. Era muy sofisticado porque los atacantes siguieron intentando diferentes
vías una y otra vez", dijo el director de KiesKompas, Willem Blanken.
El auge de Google y de su rival
tecnológico Facebook fue considerado en su momento un regalo para la democracia
y la libertad de expresión frente a los gobiernos autocráticos.
Sin embargo, recientemente ha crecido
un sentimiento de rechazo debido a la difusión de noticias falsas en las redes
sociales, que han polarizado el debate político, así como al hecho de que estas
empresas no hayan logrado impedir que grupos extremistas utilizasen sus
plataformas para extender su propaganda y encontrar nuevos reclutas.
Fuente: Reuters