19 de enero de 2014

Los siete gigantes de Internet pagan en España solo un millón en impuestos

Las filiales de Apple, Google, Amazon, Facebook, eBay, Microsoft y Yahoo trasladan el grueso de su facturación a otros países en los que la tributación es más baja

Los grandes grupos tecnológicos estadounidenses continúan dando esquinazo a la Hacienda española. Las tácticas de ingeniería fiscal diseñadas por sus asesores permiten que apenas tributen en España por el negocio que generan en el país. Las principales filiales en España de siete grandes firmas del sector (Google, Apple, Amazon, Facebook, Yahoo, eBay y Microsoft) muestran que la dotación conjunta para el impuesto sobre beneficios del ejercicio 2012 (último del que han formulado sus cuentas) sumó solo 1.251.608 euros. Un millón entre siete gigantes.

La cifra agregada esconde, en realidad, que hay empresas que pagaron impuestos mientras que otras se apuntaron créditos fiscales o impuestos a compensar en el futuro tras declarar pérdidas. Las cifras no proceden de sus declaraciones de Hacienda sino de las cuentas anuales de las filiales, depositadas en el Registro Mercantil. Se trata de partidas contables, que pueden diferir algo de las liquidaciones del impuesto en un año dado por los pagos a cuenta, el calendario de tributación y otras diferencias temporales. Pero son las partidas que esas filiales españolas destinan en un año concreto a impuestos sobre beneficios. La última de las sociedades en depositar sus cuentas fue Facebook Spain. Lo hizo en diciembre, pero sus cuentas no estuvieron disponibles telemáticamente hasta este jueves, cuando EL PAÍS las solicitó expresamente al Registro Mercantil y a raíz de ello fueron digitalizadas.

Tratan de trasladar el grueso de su facturación a otros países en los que la tributación es más baja

Con ellas se completa un cuadro en el que se impone un sistema por el cual esos grandes grupos tecnológicos tratan de trasladar el grueso de su facturación (o cuando no es posible, de su beneficio) a otros países en los que la tributación es más baja, como Irlanda o Luxemburgo. Pero además, complejas estructuras fiscales permiten que los beneficios tampoco tributen apenas en esos países. Google se lleva el grueso de sus beneficios fuera de Estados Unidos a las Islas Bermudas sin pasar casi por caja. Apple, por su parte, halló lo que un senador estadounidense denominó el Santo Grial de la evasión fiscal. Tiene filiales que, de acuerdo con la ley estadounidense, no tributan en Estados Unidos porque su sede social está en Irlanda y, de acuerdo con la ley irlandesa, no tributan en Irlanda porque se gestionan y controlan desde Estados Unidos. No tienen patria fiscal y, por tanto, no pagan impuestos en ninguna parte.

Las firmas defienden que cumplen escrupulosamente con la legislación fiscal. Los países de la OCDE y del G20 tratan de taponar los agujeros legales por los que se cuelan estas compañías. Por ahora, en la batalla por lograr que paguen impuestos acordes con los beneficios que generan en cada país, las empresas ganan por goleada.

Hacienda ha lanzado en España grandes proclamas contra la ingeniería fiscal de las multinacionales y ha creado un grupo especializado en su fiscalidad, que ha conseguido algunos resultados en multinacionales tradicionales. Pero Hacienda inspeccionó a Google y solo halló pequeñas discrepancias con su declaración. Con ello, su modelo fiscal quedó validado y con él, el de las demás compañías que lo aplican.

En el Reino Unido, una investigación del Financial Times publicada este mes mostró que la factura fiscal de esos mismos siete grupos tecnológicos fue en 2012 de 45 millones de libras (unos 54 millones de euros), que los consideraba ridículos en comparación con la dimensión de sus negocios.

En España, los datos analizados por EL PAÍS procedentes de los informes anuales de las empresas, muestran pagos al fisco muy inferiores a los británicos por parte de esas mismas empresas. El saldo neto es de 1,2 millones. Microsoft International Holdings Spain hizo frente a 10,8 millones (de los que solo 6 son en España); Google Spain, a 1,66 millones; Apple Marketing Iberia, a 2,58 millones; Amazon Spain Fulfillment, 184.000 euros; Facebook Spain, 50.000 euros, eBay Spain, 37.000 euros y Yahoo, nada. Pero esos 15 millones (de los que cuatro son de filiales que tributan fuera de España) se vieron compensados casi por completo por los créditos fiscales o impuestos a recuperar en el futuro generados básicamente por dos sociedades pertenecientes también a esos grupos: Apple Retail Spain y Amazon Spain Services.

Las filiales analizadas por EL PAÍS declaran una cifra de negocios de 577,8 millones y unas pérdidas agregadas de 15,8 millones. Cada una tiene su historia.

Fuente: El Pais.com