28 de julio de 2019

ESPAÑA. Del bloqueo Institucional a la hoguera de las vanidades.

Las derechas del PP y Ciudadanos (C´s), se han doctorado, sin necesidad de máster alguno, en sectarismo, al utilizar distinta vara de medir para, en unos casos normalizar discursos que demonizan los pactos políticos entre partidos de izquierdas que acatan la Constitución y en otros, elevar a los altares por intereses partidistas, sus pactos políticos con la extrema derecha, herederos de rancias ideas de tiempos preconstitucionales, con la esperanza que el juramento a la Constitución avale  ideas xenófobas, homófobas o sexistas, pero debo recordarles, que ciertamente, aunque la Constitución según su artículo  14, permite libertad de pensamiento y opinión, no así permite la discriminación por razón de los citados criterios. Aunque comprendo el nerviosismo de las derechas por el peligro latente, que pudiera traer nuevas elecciones generales, que probablemente les hundieran, en el abismo de la madre de todas las derrotas electorales.
En primer lugar, para teatrillo o paripé que las derechas van diciendo por los medios de comunicación, la supuesta carrera por liderar los conservadores y los sillones, en la formación de gobiernos Autonómicos y Municipales del país, (ignorando la Regeneración Democrática, por supuesto),  dentro de la plataforma ultraconservadora, que está dejando un supuesto vencedor, PP, y también un supuesto perdedor, Vox, ninguneado por C`s en Madrid, Murcia y Andalucía,  donde les negaron lo pactado y luego de no pocos desplantes devueltos, “pelillos a la mar”, y corriendo a pactar, que un sillón es un sillón. Lo que decía, mucho teatrillo y mucho paripé.
Y capítulo aparte merece el partido C´s, cuyo máximo dirigente en su endiosamiento personal, se cree líder de la oposición y de los conservadores, enemigo declarado de los españoles que no piensan como él y paladín de la “Regeneración Democrática”, que con gran hipocresía por su parte, niegan la evidencia de pactos a tres bandas o por poderes, con PP y Vox, socios en Andalucía, Madrid, Palencia,......., mientras se aprovechan de dichos votos para entrar en los gobiernos correspondientes, e intentan bloquear, legítimamente, donde no gobiernan, pero eso sí, culpabilizando al PSOE de todos sus males por las consecuencias de su espectacular giro a la derecha extrema, que ha adelantado a Vox por el carril derecho, provocando la huida del partido de los padres fundadores de la marca política.
Pero del Recurso por la sentencia absolutoria del Tribunal de Cuentas de mayoría conservadora, que ha librado a la exalcaldesa de Madrid Ana Botella y a siete cargos de su Gobierno de multa de 22 millones de euros por venta de pisos sociales a fondos buitre a precio de derribo, “ni hablamos” dicen desde  el Ayuntamiento de Madrid con alcalde y vicealcalde del PP y C´s respectivamente, apoyados por los votos de Vox. ¡Viva la Regeneración Democrática! , ¡Viva España! y amén. ¿Por cierto, se sabe algo al respecto del Fiscal General del Estado?.
Y en segundo lugar, Secesionistas y Populistas, que solo esperan su turno para exprimir al Estado, cuando no bloquear las Instituciones Estatales o Autonómicas, todo ello con permiso de la plataforma ultraconservadora, que nada hace por evitarlo, quizás por aquello de “cuanto peor mejor”.
Pero ni el bloqueo a la investidura  y  los sonrojantes, aunque legítimos, pactos de los primeros, (los conservadores perdedores de elecciones con Vox), que olvidan a propósito la Regeneración Democrática, afeados desde Europa y no bendecidos como aseguran unos exultantes Rivera y Casado, ni la reprochable actitud de los segundos, que llegada la votación de los PGE, coaccionan al Ejecutivo con nuevas elecciones si no se adoptan soluciones extrajudiciales o aconstitucionales a problemas varios, no creo que ambas dos, deban considerarse ejemplares demostraciones de actitudes democráticas.
La mejor defensa es un buen ataque  ¿Y la ciudanía qué?
La investidura del Presidente del Gobierno, en el Parlamento Español, reconvertida en moción de censura, que pudiera consumarse entre el 23 y 25 de Julio, con sendas rondas previstas de votaciones en contra o abstenciones, por la alianza de partidos conservadores, junto a populistas y secesionistas, que pretenden, por espurios motivos,  el objetivo común de bloquear la formación del nuevo Gobierno del Ejecutivo y por tanto al candidato a la Presidencia del Gobierno de la lista más votada en las últimas Elecciones Generales, Pedro Sánchez, Presidente en funciones, que nos conduciría, al no haber otra investidura viable, irremisiblemente a una investidura fallida y pasados dos meses, por imperativo legal, a unos nuevos comicios electorales, que según la última encuesta del CIS solo beneficiaría al PSOE, siempre y cuando, fuese capaz de movilizar al electorado de centro e izquierda, dada la probable abstención.
La consecuencia inmediata del Gobierno en funciones, es la obligación legal de continuar con Presupuestos Generales del Estado prorrogados, que por ejemplo supone, que solo el déficit de la Seguridad Social aumente a razón 19.000 millones de euros al año, que obviamente influye negativamente en la calidad de la Sanidad de todos los españoles y en la viabilidad de los 9,73 millones de pensiones.
Existe un precedente del “no es no” del actual Presidente en funciones, que en 2016, siendo Diputado electo y líder de la oposición,  dignamente dimitió de todos sus cargos, como político de estado que es, para sin renunciar a sus convicciones, no bloquear la investidura del Presidente Mariano Rajoy, pero a día de hoy, dudo mucho que nadie dimita, lo cual demuestra la gran distancia que existe con el resto de líderes políticos actuales seguidores del “no es no”. Porque citando a Aristóteles “la dignidad no consiste en tener honores, sino en merecerlos”.
Además, dicen las malas lenguas, y quien soy yo para afirmarlo o negarlo, que las derechas se han fijado como meta que las izquierdas pacten, para después por medio de una política de desgaste, lograr que Pedro Sánchez se estrelle, la Legislatura nº 13 fracase y encima llevarse los méritos de ello. Y si así fuese, siendo una estrategia electoral legítima, resta por ver, quien iba a quedar para zurcir los agujeros en los bolsillos de los ciudadanos o quizás no siendo así, fuese solo por el interés general y simplemente habría que repartir los dineros públicos otra vez con los bancos como con Rajoy, siempre muy dadas las derechas a ser generosas con nuestros impuestos, compartiéndolos con los poderosos, cosa que por otra parte creo recordar no hizo ni Irlanda ni Islandia. En cualquier caso, cuan triste sería de nuevo dicho supuesto panorama, de quienes se llaman patriotas así mismos.
¿Se ha perdido el espíritu político de la Transición o falta Cultura Democrática?
 En mi modesta opinión, considero que se ha perdido completamente dicho espíritu político de la Transición que propició el acuerdo para el cambio de la dictadura a la Democracia actual. Y respecto a la Cultura Democrática, falta mucho más entre la clase política, que entre el pueblo llano.
Puesto que el “imperativo moral” de los legítimos postulados antisistema, de partidos conservadores, populistas y secesionistas, no considero fundamento legal suficiente, para traicionar la confianza de todos los españoles y tener paralizadas las Instituciones de todo un país, con alquileres disparados, renovaciones del Poder Judicial pendientes y  Presupuestos Generales del Estado prorrogados, obligando a celebrar casi anualmente Elecciones Generales desde 2015, alcanzando en su conjunto dichas convocatorias electorales un coste global aproximado de 1.000 millones de euros para las arcas públicas, que bien podían haberse destinado a prioridades sociales de los más desfavorecidos, como niños y menores en riesgo de exclusión social.
Por otra parte y en mi humilde opinión, siendo grave lo anterior, lo más preocupante es la mediocridad de esta generación de políticos radicales de nuevo cuño, más preocupados por agrandar egos propios y supervivencias políticas personales, que de hacer política seria de Estado, cuando no utilizar lenguaje tabernario que denigran las Instituciones políticas dentro y fuera de España.
Que van pregonando a los cuatro vientos, no admitir lecciones de democracia de nadie, cuando por culpa de su manifiesta irresponsabilidad, frentismo, obstruccionismo, e incapacidad para lograr acuerdos de Estado, tienen a España sumida en una grave crisis Institucional permanente, de la cual, muchos de “sus señorías” no se sienten concernidos, con lo que degradan aún más la imagen de la clase política, que  como indica la última encuesta del CIS, los españoles ya identifican a la clase política como el segundo problema nacional en importancia, tras el desempleo, y eso, por lo anteriormente expuesto, me lo creo.
De los derechos de la ciudadanía.
La Constitución Española en su artículo 1, apartado 2, nos dice, “La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado”.
Y en su artículo 6, nos informa que “Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política”, cito la Constitución porque a mi modo de ver, algunos políticos esto no lo tienen claro.
Con lo cual, entre ambos artículos, se constata que “El Estado de derecho se fundamenta en los ciudadanos, como dueños y señores de las instituciones políticas, mientras que los políticos no son ni más ni menos que gestores del interés general y de las necesidades colectivas de las personas”.
Por tanto, tras reflexionar sobre los derechos de la ciudadanía, cuando estos se encuentran enfrentados a las decisiones de sus representantes en el Parlamento, Diputados y Diputadas electos, he concluido que en Democracia, de confrontar las decisiones del Congreso de los Diputados con la decisión soberana de los ciudadanos salida de las urnas, debe prevalecer la opinión de estos últimos, por propia definición de la Democracia “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” enunciada por Abraham Lincoln.
Por todo lo anterior, en mi propio nombre y consideración, en favor del normal funcionamiento de la Instituciones, presento aquí, estas propuestas a futuro, que ayuden a subsanar las evidentes anomalías democráticas actuales.
1.Caso de elección de la Presidencia del Gobierno, propongo que dicha prerrogativa recaiga directamente sobre la ciudadanía por medio de unas Elecciones Generales a doble vuelta, en el supuesto del Candidato a Presidente del Gobierno de la lista más votada, no hubiese obtenido mayoría absoluta en la primera vuelta, para así evitar la parálisis Institucional a las que nos tienen sometidos “sus señorías” desde diciembre de 2015.
2.Caso de aprobación anual de Presupuestos Generales del Estado, propongo que, en el supuesto de ser rechazados por el Congreso de los Diputados, sean sometidos a Referendo consultivo, y de ser igualmente rechazados por la ciudadanía, entonces y solo entonces, se convoquen a todos los ciudadanos a Elecciones Generales con motivo del rechazo del PGE en Referendo.
Esta propuesta, aunque novedosa, no me parece descabellada, ni fuera de lugar, puesto que según dice el artículo 92 de la Constitución Española, “Las decisiones políticas de especial trascendencia podrán ser sometidas a referéndum consultivo de todos los ciudadanos” y no cabe duda que los asuntos económicos de todo el Estado, son de especial trascendencia para todos los que vivimos en España.
EN RESUMEN
Como pueden comprobar “sus señorías”, este humilde ciudadano si se siente concernido por el “impase” que vive España, que trasciende a toda la sociedad española, y que aun no siendo jurista, reconoce las dificultades del proceso a seguir, por el amplio consenso parlamentario necesario para la modificación de la Constitución Española si fuera inevitable y del resto de la Legislación vigente afectada.
Además, dadas las actuales circunstancias y considerando las mínimas posibilidades que existen, que partidos conservadores, secesionistas y populistas, rectifiquen posiciones en sus legítimos postulados antisistema, no veo otra solución legislativa  presente o futura, por  vía pacífica, para salir del enquistamiento Institucional que ya dura cuatro años, que modificar el proceso de Investidura de la Presidencia del Gobierno, por cualquier opción legítima, la aquí presentada u otras propuestas realizadas desde otros ámbitos, y modificar también el proceso de validación de los PGE, caso de ser rechazados por el Congreso, por medio de Referendos consultivos.
CONCLUSION
A la ciudadanía no solo le asiste la Constitución para criticar actitudes dudosamente democráticas, que a su entender pudieran estar produciéndose, sino que además tiene la obligación moral de hacerlo, por respeto a los que no tienen altavoz para denunciarlo y cuando ninguna otra Institución acuda en su auxilio. E incluso debe, si lo considera pertinente, aportar propuestas al respecto, en pro de la participación ciudadana.
Por otra parte, los españoles no merecemos el trato displicente, casi despectivo, que le dispensan algunos políticos irresponsables, y mucho menos, ser rehenes de los mismos.
Por último, espero de sus señorías responsabilidad, generosidad y altura de miras, que se traduzca en la lealtad debida a toda la ciudadanía, (implícita en su promesa o juramento de acatamiento a la Constitución Española), y se anteponga a la lealtad autoimpuesta al ideario político de sus respectivos partidos, y permitan la investidura del Presidente del Gobierno. No siendo así, en la urnas se lo demandaremos.
"QUID PRO QUO"
A más irresponsabilidad política,
más Democracia.