25 de mayo de 2025

OPINIÓN. De los jueces que son tan independientes, que pasan de las normas y hasta de sus superiores.

 Con la excusa de reivindicar, "la independencia" , la derecha judicial está utilizando todos los medios a su alcance para acabar con el gobierno progresista, siguiendo el eslogan de Aznar cuando dijo,  "el que pueda hacer, que haga"   

La titular del juzgado número 3 de Badajoz, Beatriz Biedma, ha abierto juicio oral a David Sánchez, al presidente de la diputación, Miguel Ángel Gallardo, y a nueve personas más por delitos de tráfico de influencias y prevaricación relacionados con la creación de una plaza de coordinador de los conservatorios y su posterior adjudicación al hermano del presidente. Y lo ha hecho cuando la Audiencia Provincial todavía no ha resuelto los recursos de apelación presentados por la fiscalía y las defensas lo que supone una manifiesta irregularidad procedimental que la magistrada justifica porque dichos recursos no tienen “efectos suspensivos”. El fiscal no ha presentado acusación y ha pedido el archivo de la causa. Pero Biedma se apoya en que la acusación popular, representada por asociaciones de extrema derecha personadas en la causa, la han pedido la apertura del juicio oral.  Estamos en situación parecida al procedimiento que originó la llamada “doctrina Botín (*)
(*) La “doctrina Botín” es una corriente jurisprudencial del Tribunal Supremo, establecida en la Sentencia 1045/2007 de 17 de diciembre, que resolvió un recurso de casación interpuesto por la acusación popular, integrada por la Asociación para la Defensa de Inversores y Clientes (ADIC) e Iniciativa per Catalunya contra un auto de la Audiencia Nacional, que sobreseyó el proceso penal contra Emilio Botín por un delito fiscal. El TS desestimó el recurso, al considerar que, aunque es cierto que el derecho a la acusación popular está previsto en la Constitución, eso no impide que la ley pueda imponer límites a su ejercicio. La corte considera que si el Ministerio Fiscal y los perjudicados (en este caso era la Hacienda Pública), consideran que debe sobreseerse el proceso, la acusación popular no debería bastar por sí sola para seguir con el proceso. La “doctrina”, que ha sido recogida en numerosas sentencias sentando la oportuna jurisprudencia, establece que no puede abrirse juicio oral cuando la fiscalía y los perjudicados piden el sobreseimiento.
 En numerosos procesos judiciales se ha tenido que volver a discutir el espíritu y la letra de la “doctrina Botín”. Tal vez el más recordado fue el juicio del caso Noos, donde la fiscalía retiró la acusación contra Cristina de Borbón, pero no sirvió de nada puesto que la mantuvo la acusación popular, entonces representada por Manos Limpias. El asunto se tornó en escándalo cuando se supo que el seudosindicato de extrema derecha había participado en las negociaciones que llevó a cabo el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, con cualificados empresarios y abogados catalanes a los que pidió dinero a cambio de la retirada de dicha acusación. Curiosamente, en la causa contra David Sánchez, está personada Manos Limpias

La jueza no tiene en cuenta dicho criterio. En cambio, se acoge a otras sentencias del Supremo en las cuales se señala que “la acusación particular está legitimada para pedir la apertura de juicio oral”. Además de Manos Limpias forman parte de la acusación popular, Vox, Hazte Oír, Liberum, Iustitia Europa, Abogados Cristianos y el Partido Popular. Piden tres años de cárcel para los acusados y la devolución por parte de David Sánchez de los salarios recibidos.

Pero lo más grave no es eso. La jueza ha dictado el auto sin tener en cuenta los recursos presentados por la fiscalía y las defensas en los que piden el sobreseimiento de la causa porque alegan que, en la misma, sólo hay “conjeturas e hipótesis”. La instructora cree que estos recursos no tienen efectos suspensivos. Pero ¿Qué ocurriría si la Audiencia Provincial avala la tesis del ministerio público? El daño ya estaría hecho. Estamos en la misma situación que la de Begoña Gómez con el juez Peinado. La repercusión social hace un daño reputacional no ya al PSOE sino a los particulares imputados a los cuales les costará mucho volver a recuperar su imagen.

Además, la jueza no tiene en cuenta que uno de los imputados, el presidente de la Diputación, Miguel Ángel Gallardo, está a punto de tomar posesión como miembro del parlamento de Extremadura lo que le implica rango de aforado. En ese caso, ya no será un juzgado de Lo Penal el encargado de dictaminar la sentencia sino el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura. Habría que empezar de nuevo todo el procedimiento. Pero eso a la jueza le debe importar muy poco.

Lo grave es que últimamente estas actuaciones judiciales se están repitiendo con demasiada frecuencia. Juan Carlos Peinado, el juez del caso Begoña Gómez hace caso omiso de las advertencias de sus superiores de la Audiencia Provincial. Le han prohibido que siga indagando el asunto del rescate de Air Europa. Incluso le han ordenado que retire la petición de los expedientes solicitados a la SEPI sobre las ayudas recibidas por la aerolínea del grupo Globalia y ha debido de hacer poco caso porque, de momento, no ha dictado un auto recogiendo la orden de sus superiores.

Los jueces cada vez se cortan menos a la hora de expresar sus afinidades políticas. El magistrado del Supremo, Manuel Marchena, ha advertido, en un libro que “la justicia está en peligro. Un juez que aspira a ser su compañero en la corte, el controvertido expresidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, intervino en un acto de la Fundación Neos, que preside el exministro muy cercano a la ultraderecha, Jaime Mayor Oreja, para lanzar una peligrosa consigna: “debemos de salvaguardar la independencia del poder judicial, porque si prescindimos de la independencia del poder judicial hemos matado la vida jurídica”.  Reflexión casi idéntica a la expresada por Marchena.

Fuente: Diario16plus.com


CONCLUSIÓN

Partiendo de la premisa de reivindicar la “independencia” , la derecha judicial está utilizando todos los medios a su alcance para acabar con este gobierno progresista. Muchos de sus miembros parecen haber recogido la consigna de José María Aznar de que “el que pueda hacer, que haga”. Y aquí valen resoluciones judiciales, intervenciones públicas y acciones de todo tipo. La estrategia está clara. Incluso si hay que saltarse las órdenes de los superiores, pues supongo entienden que todo vale para derrocar al gobierno actual e instaurar la anarquía en España. Curiosa forma de proceder de jueces en ejercicio y ultrajante legado que van a dejar para la posteridad, solo comparable al de jueces de la época franquista.

Un lawfare de manual, que lógicamente, debiera servir para hacerles la campaña a PP y Vox, que a base de deshumanizar al gobierno actual, intentan derrocarle. Pero esto tiene el enorme inconveniente de dejar a la justicia española a los pies de los caballos, lo cual se constata cuando llegan casos desde España a los tribunales europeos, donde los jueces españoles reciben un varapalo tras otro.

Me hace gracia el todavía líder del PP (ya veremos que ocurre en el cónclave de julio del PP, que previamente la entrenadora Aguirre ya le ha dicho a Ayuso que caliente que pronto va a entrar,  sustituyendo a Feijóo)

Bueno decía que me hace gracia el jefe de la oposición, cuando dice, que ellos (el PP) respetan la democracia, no la corrupción. Pero esto es disculpable puesto que, nos tiene acostumbrados a sus sonados lapsus de memoria, dado que  cuando está en Badajoz se siente andaluz, y cuando está Sevilla se siente cordobés, y si está en Valencia se siente catalán, de Barcelona para más señas.

Entonces, visto lo visto, estoy seguro que el Sr. Feijóo quería decir que, “el PP respeta la corrupción, no la democracia”.

Si fuese al contario, tal y como manifiestan desde el PP, Mazón estaría en el paro hace tiempo, a la espera de alguna imputación por dejación de funciones  e incluso por posible homicidio imprudente, el día de la dana en Valencia; y Ayuso idem, esperando imputación por los 7.291 ancianos fallecidos en las residencias de Madrid, sin servicios médicos ni hospitalarios, durante la pandemia. Y tampoco tendría pendiente el PP, un calvario de juicios (unos 30) por corrupción de aquí hasta el 2030, siendo entre otros, los más conocidos, Gürtel,  Púnica y Lezos, casos de corrupción todos ellos, que marcan una década negra judicial  para el partido popular.

Por cierto, al líder del partido popular alguien debiera advertirle, que no es conveniente seguir el manual de Goebbels al pie de la letra, porque sino, resulta muy difícil poder explicar  que el PP no es un partido de ultraderecha. Por ejemplo, llamar indecente a todo el mundo que tiene valores, no casa muy bien con lo de ser un partido de centro, más parece propio de una ideología de extrema derecha, como pudiera tener Vox. 

Por otra parte, por si todavía queda algún liberal en el PP, debieran taparse un poco, pues poner otro ejemplo, no parece lógico que el líder del PP, vaya llamando indecente a un gobierno legítimamente elegido, teniendo en cuenta lo que él tiene en casa. Y no me refiero a su familia, que también (él mismo veraneaba con narcotraficantes),  sino y principalmente, a los casos de corrupción dentro de su propio partido, arriba someramente indicados y concretados en los enlaces anteriores. 

Y se les quedase algo de vergüenza a todos ellos, se irían de la política y hasta de España, haber si así reflexionan y cambian de idea de una vez por todas, que a la política no se llega para forrarse, sino que se viene para servir a la ciudadanía en favor de sus derechos y libertades. Y por supuesto, mereciendo el mismo respeto y consideración, todos por igual, sin dejar tirado a nadie, ni por pandemias, ni por danas o ni por cualquier otra catástrofe, o circunstancia negativa para la ciudadanía. Y nunca discriminando  por razón de edad, sexo, lugar de nacimiento o religión (artículo 14 de la Constitución española). 

Y no como en la crisis económica de 2012 donde Rajoy mandó a las colas del hambre a la mitad de España (principalmente a los más desfavorecidos) 


POSDATA

Cuatro  apuntes rápidos sobre los desmanes de PP y Vox. Y unas cuantas cuestiones elementales.

Apuntes rápidos de las tropelías de PP y  de Vox

  1. Con el aplauso de ambos partidos, Israel siempre ganará Eurovisión o quedará segundo, gracias a que hace manipulación del voto popular según reconoce The New York Times
  2. Los dos partidos presionan en Europa, para que, gallego, euskera y catalán, no sean idiomas oficiales en la UE, como ya lo son en España. Ya si eso, cuando lleguen las elecciones, que los votantes de dichas autonomías les voten, a ver si así consiguen la mayoría absoluta, para hacer otras más gordas. 
  3. No busquen más, el partido político más mafioso de  España es el partido popular con el caso ya juzgado y condenado de su policía patriótica del ministerio de interior  del gobierno del PP de Rajoy , como emblema.
  4. Con la comprensión de ambos partidos, el gobierno sionista de Israel, continua con el exterminio del pueblo palestino en Gaza y Cisjordania, ayudado, por un grupo de países de la UE y por Estados Unidos, donde  cada  grupo suministra la mitad de las bombas con las que principalmente han masacrado a casi sesenta mil civiles palestinos, de los cuales la mitad eran niños.

Cuestiones básicas

Al Gobierno de Israel, al de EEUU y al de la UE, les pregunto. 

  1. Si los causantes del holocausto judío eran nazis ¿ahora que son gobierno y ejército de Israel?
  2. ¿Cómo debería calificarse a los países que suministran las armas para semejante barbarie?
  3. ¿Cual es la diferencia entre el holocausto judío y el holocausto palestino, y por qué el primero estuvo mal y el segundo está bien? 
  4. ¿Será porque ahora depende si es aliado o no, el país agresor que comete crímenes de guerra y/o de  lesa humanidad?
  5. ¿Son justos y éticos estos planteamientos, o con esos postulados, que no respetan el derecho internacional, nos encaminamos hacia una hecatombe mundial?

Fuente: Redacción 


Poema de Martin Niemöller

¾  Primero vinieron por los comunistas, y no hice nada porque no era comunista.
¾  Luego vinieron por los socialistas, y guardé silencio porque no era socialista.
¾  Luego vinieron por los sindicalistas, y no hablé porque no era sindicalista.
¾  Luego vinieron por los judíos, y no dije nada porque no era judío. 
¾   Luego vinieron por mí, y para entonces ya no quedaba nadie que hablara en mi nombre